El mes de noviembre comenzó con la puesta en marcha la primera Semana de la Ciencia. Conscientes de que era la primera edición, esta idea pretendía ser una iniciativa modesta que permitiera seguir caminando en la línea que iniciada hace ya varios años de promover las vocaciones científicas y tecnológicas entre nuestro alumnado.
El resultado ha sido un mes cargado de ilusiones, de detalles maravillosos, de nervios, de sorpresas, de experimentos en el laboratorio, en el patio, en los talleres, de experiencias enriquecedoras, de risas, compañerismo, trabajo en equipo y, sobre todo, de mucha satisfacción por los resultados, que han desbordado ampliamente las expectativas iniciales.
Profesores, alumnos y familias coinciden en valorar muy positivamente la experiencia, que ha conseguido llegar a todos los alumnos de todas las etapas, e implicar a un enorme número de profesores de las áreas científicas y técnicas.
Los aspectos más interesantes de la “I Semana de la Ciencia” han sido:
El alcance: Se ha llegado al 100% de las etapas del centro, ya que se diseñaron actividades dirigidas cada una de las etapas educativas (infantil, primaria, ESO, Ciclos Formativos, FPB y Bachillerato).
La participación del propio alumnado en el diseño de las actividades: Un buen número de actividades han sido preparadas por alumnos de algunos niveles educativos para otros alumnos, con el asesoramiento y guía de los profesores. Este tipo de actividades han contribuido a que adquieran un mayor compromiso y responsabilidad con su propia formación, fomenten su creatividad y mejoren sus destrezas de comunicación.
Las sinergias entre etapas: Más allá de lo estrictamente científico, ha sido maravilloso ver trabajar juntos a pequeños y grandes, con multitud de situaciones en las que se ha dado un enriquecimiento mutuo, una mejor comprensión del otro y se han creado lazos afectivos.
La multidisciplinariedad: Esta es una característica de Salesianos Málaga, y un punto fuerte que se ha puesto de manifiesto en estos días. Las diferencias entre los itinerarios formativos de ESO, Ciclos Formativos y Bachillerato, así como los distintos perfiles del profesorado, han permitido que la oferta de actividades sea mucho más rica y variada (motores, bobinas, circuitos, se han codeado con fluidos no newtonianos, ósmosis o las últimas novedades en investigación sobre el cáncer).
La implicación y colaboración del profesorado y de la dirección del centro: Esto no hubiese sido posible sin la dedicación y entrega de muchos profesores. También ha sido clave el apoyo de la dirección del centro y de los jefes de estudios, que han facilitado cada detalle.
El año que viene… ¡más y mejor!