El campus The Challenge de EduCaixa ha reunido en Barcelona a 370 estudiantes de Educación Secundaria comprometidos con la sostenibilidad. Repartidos en 100 equipos provenientes de España y Portugal los participantes han desarrollado 100 proyectos innovadores para cambiar el mundo, con el foco puesto en la protección del planeta. Fruto de la creciente preocupación de los jóvenes por la emergencia climática, casi la mitad de las propuestas presentadas en el campus de este año se enmarcan en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas relacionados con el planeta, como la gestión del agua, la acción por el clima, la protección de la vida submarina y los ecosistemas terrestres. También ligados con los retos medioambientales abundaron los proyectos relacionados con la prosperidad como la producción y el consumo responsables, las ciudades y comunidades sostenibles, y la energía asequible y no contaminante. El resto de equipos participantes presentaron proyectos relacionados con otros grandes retos de futuro vinculados con los ODS como el bienestar de las personas y la paz.
Los 100 equipos han sido seleccionados entre 1.546 candidaturas inscritas en The Challenge y están compuestos por alumnos de 3º y 4º de ESO, Bachillerato y FPGM. En total, participan 370 alumnos y 100 docentes de 77 centros escolares de España y Portugal, la mitad de ellos públicos.
Entre estos 100 equipos se encuentran 4 pertenecientes a colegios Salesianos con propuestas muy innovadoras, como el proyecto “Detén el pez de plástico” de Salesianos Rota, que proponía implementar el hongo Zalerion Maritimum en la última fase de depuradoras o en dispositivos en la desembocadura de los ríos para aprovechar el consumo que hace este hongo del plástico y así poder revertir el estado del agua, reduciendo la cantidad de micro plásticos presentes en la misma.
El proyecto “IAM” de Salesianos San Antonio Abad, que trata de una pulsera con un chip NFC de fácil lectura con cualquier teléfono móvil, que proporciona un número de teléfono de algún familiar al que poder avisar en caso de desaparición, además de contener los datos médicos que una persona quiera compartir, tales como el grupo sanguíneo, las alergias, enfermedades crónicas o alguna operación previa.
También sobre los microplásticos se centra el proyecto “Blue Sea” de Salesianos Avilés, que han ideado un dispositivo que consta de una boya que le proporciona flotabilidad y una cápsula hecha a partir de plásticos reciclado, y que mediante paneles solares suministran energía para alimentar una bomba de agua, que lo que hace es succionar agua de las capas más superficiales e intermedias y que el agua sea devuelta filtrada al mar. Y que sirve tanto para micro plásticos, hidrocarburos y aceites.
Por su parte, Salesians Sarrià, junto a los alumnos de Bachillerato Internacional, presentaron su proyecto “Water Wheel”, por el uso responsable y económico del agua en el hogar. Un concurso de proyectos creativos y singulares donde la escuela salesiana está obteniendo unos excelentes resultados los últimos años.
Durante el campus, los equipos han podido desarrollar sus proyectos con la ayuda de una veintena de educoaches, que se han encargado del acompañamiento, la orientación y el apoyo educativo. Mediante talleres, charlas y experiencias programadas en el campus, los alumnos han conectado entre ellos, entrenado competencias y compartido aprendizajes. Se han realizado visitas a centros y entidades de referencia como el Hospital maternoinfantil Sant Joan de Déu, Open Arms, RTVE Catalunya, NTT Data, Groots, Campus 42 Barcelona y Teamlabs.
Al final de campus, cada equipo presentó su proyecto ante el jurado, que ha dado a conocer los 17 equipos premiados el pasado 11 de mayo, encontrándose entre los ganadores dos de los proyectos Salesianos como son “IAM” de San Antonio Abad en Valencia y “Blue Sea” de Salesianos Avilés. El premio será un viaje formativo a Estados Unidos este verano. La estancia incluye visitas a algunas de las universidades más prestigiosas de Nueva York y Boston como el MIT, Yale y Columbia; y la presentación de los proyectos en la sede de las Naciones Unidas.
“Los chicos del equipo de nuestro centro, Salesianos Avilés, fueron sensible a su entorno y tras un proceso de investigación, consultando OpenDatas a nivel nacional e internacional, se dieron cuenta que en menos de 100 años hemos plastificado nuestro planeta y que esto teníamos que poner nuestro granito de arena, por un lado reparando el daño que estábamos causando a nuestra planeta, y por otro lado creando conciencia social intentando evolucionar hacia un modelo económico circular.
Para reparar los daños causado por un lado: los alumnos han ideado un dispositivo que consta de una boya que le proporciona flotabilidad y una cápsula hecha a partir de plásticos reciclado, y que mediante paneles solares suministran energía para alimentar una bomba de agua, que lo que hace es succionar agua de las capas más superficiales e intermedias. se filtra y el agua es devuelta filtrada de nuevo al mar.
Además observaron que en nuestra ría de Avilés a veces hay manchas de aceite e hidrocarburos, entonces se pusieron en contacto con una empresa que les proporcionó unas muestras de una manta de polipropileno que absorbe aceites y repele el agua, y lo instalaron dentro del dispositivo que desarrollaron para que no sólo filtrara los microplásticos sino también estos contaminantes.
Para crear conciencia social: están realizando talleres de bioplásticos con residuos como cáscaras de naranja, posos de café, de tal manera que esos residuos entran de nuevo en la cadena de producción fomentando la economía circular y convirtiéndose estos en auténticos sustitutos de los plásticos de un solo uso.
Durante el campus vivido en Barcelona y tras la formación recibida los alumnos decidieron emprender, y emprender socialmente. Para ello tanto los dispositivos como las láminas de bioplásticos pueden ser realizadas por personas en riesgo de vulnerabilidad, discapacidad o minusvalía, resaltando que todos cabemos en esta sociedad y que sólo hay que cambiar la forma de pensar”.
