El segundo día del Campobosco 2024 (#CPB24), tras la inauguración de la tarde anterior, llevó a sus participantes a recorrer la Barcelona salesiana.
Después de la oración y la presentación del día, los participantes se dividieron en dos grupos para visitar con calma todo el itinerario programado. Uno de los grupos visitó el Museo de Martí-Codolar, donde se empaparon de historia salesiana, recordando la visita especial que Don Bosco realizó a Barcelona entre abril y mayo de 1886, dos años antes de su fallecimiento. También rememoraron la histórica fotografía del 3 de mayo de 1886, en la que Don Bosco aparece sentado, rodeado de chicos huérfanos del Oratorio de Sarriá, junto a personalidades de la sociedad barcelonesa, como la Venerable Doña Dorotea de Chopitea y Don Rua.
Este grupo también recorrió otros lugares salesianos de Barcelona: Can Prats, donde San Juan Bosco tuvo el sueño misionero de la joven Congregación Salesiana durante su visita de 1886; la Parroquia de María Auxiliadora de Salesianos Sarrià; y la cercana Torre Gironella, presencia de las Salesianas en Barcelona gracias a la intercesión de Doña Dorotea de Chopitea.
El otro grupo se encontraba en el Templo Expiatorio del Sagrado Corazón de Jesús en el Tibidabo, a cargo de los Salesianos. Además de disfrutar de las espectaculares vistas de la ciudad, los jóvenes visitaron la Cripta con la capilla de adoración perpetua al Santísimo Sacramento, la Iglesia y la parte superior del Templo, a los pies de la enorme imagen de Jesús de 8 metros de altura.
Durante la tarde, después de comer y descansar, se realizaron las mismas visitas, alternando los grupos y las zonas de la ciudad.
Al regresar a Salesianos Martí-Codolar, todos tuvieron un momento grupal para comentar y reflexionar sobre lo que habían visto durante la jornada en Barcelona.
A las 20h, los participantes y equipo cero, pusieron en manos de Dios todo lo vivido en el día. Daba comienzo la Eucaristía, presidida por Fernando Miranda, Inspector de Salesianos María Auxiliadora, junto a Fernando García, Inspector de Salesianos Santiago El Mayor, y el resto de hermanos salesianos. En ella y siguiendo la liturgia del día, nos invitaba a reforzar los lazos de amistad y así como una gran familia que somos todos los que vivimos el evangelio al estilo de don Bosco nos animemos mutuamente en la búsqueda de Cristo, el buen pastor que siempre nos acompaña. Un seguimiento de Jesús, implica acumular solo los bienes y riquezas que vienen de Dios.
Don Bosco me ha encontrado
Las Buenas Noches estuvieron a cargo de Fernando García. Un mensaje claro y profundo donde interpeló a cada uno sobre la calidad de las relaciones en nuestras casas y centros juveniles. “Don Bosco me ha encontrado”. Nos ha encontrado y se ha convertido para cada uno de nosotros. Una invitación fuerte a convertirse en referentes para los niños y jóvenes de nuestras casas, y a ser contemplativos de las cosas que nos pasa, para saber descubrir dónde está Dios.
Después, a descansar. Al día siguiente les espera el largo viaje a Italia, hasta el Colle Don Bosco, donde comenzará la visita a los lugares salesianos en el Piamonte.