Este año los alumnos de Salesianos San José Artesano junto con sus docentes, participarán nuevamente con el Proyecto Picudo en la Shell Ecomarathon, competición internacional que se estructura por continentes (Europa-África, Asia y América) que se celebrará en Rotterdam (Holanda). El objetivo principal de esta competición consiste en diseñar y construir un vehículo que recorra la máxima distancia posible con tan sólo un litro de gasolina. El otro objetivo, “sin duda es el plus formativo que significa para los muchachos en modo de experiencia, no sólo profesional eminentemente práctica, sino humana al convivir durante una semana en un ambiente multicultural y prurilingue, ya que se darán cita más de 3.000 jóvenes de toda Europa y África” explican los organizadores.
La participación de los alumnos salesianos comenzó a principio de curso con los trabajos de diseño del prototipo y elaboración de moldes, para la fabricación posterior del chasis, a la vez que otros miembros del equipo comienzan con los trabajos de preparación del motor así como el sistema eléctrico y de frenado de todo el vehículo; en definitiva es elaborar un coche partiendo de simplemente una idea.
Este año participan 15 alumnos salesianos que cursan diferentes ciclos formativos de grado medio (carrocería, electromecánica, mecanizado, electrónica y administrativo). Esto es de destacar ya que en la competición, la mayoría de los equipos está formado por alumnos de Institutos de Grado Superior, Institutos Tecnológicos y Universidades, tanto civiles como militares. Les acompañan los profesores, Jesús Manzanera y Carlos Berenguer, el primero de ellos se dedica a toda la cuestión técnica del proyecto, mientras que el segundo se encarga de la parte de gestión y comunicación del mismo.
Además, cuentan con el respaldo y ayuda de todo el centro, comenzando por la propia comunidad salesiana y claustros de profesores de ambos colegios salesianos radicados en Elche y es que desde un inicio se planteó como un proyecto de todo el centro siendo partícipes del mismo el conjunto de los alumnos.
El año pasado participaron por primera vez, tanto en la pruebas de entrenamiento realizadas en Valencia en el Circuito Ricardo Tormo de Cheste, como en la competición realizada en Rotterdam (Holanda) en un circuito urbano creado para la ocasión. La vasta experiencia cosechada en dicha edición es lo que ha permitido a los alumnos definir el proyecto de este año, introduciendo importantes mejoras técnicas al mismo, rediseñando el chasis para su fabricación íntegra en fibra de carbono, aplicando materiales que habitualmente se utilizan en Fórmula 1 así como en la industria aeronáutica o incorporando un motor Honda que deberán adaptar para ser regulado por un nuevo sistema eléctrico mucho más eficiente.
“La ilusión y alegría con la que viven el proyecto es uno de los elementos esenciales para poderlo llevar a buen término, ya que ello se refleja en un gran ambiente de trabajo en equipo lo que resulta de suma importancia, por ser un buena motivación para muchos de sus compañeros del centro.
