Comienzan los actos por los 125 años de Salesianos Carmona
Crónica de Ezequiel García
No cabía un alfiler. Y es que la ocasión lo merecía. Cumplir 125 años es algo, en los tiempos que corren, inaudito. Pero con don Bosco y María Auxiliadora, todo es posible. Miles y miles de generaciones que han pasado por las aulas de la Casa del Santísimo Sacramento en sus dos ubicaciones, la histórica del barrio de Santiago y la actual en el antiguo Tiro de Pichón juntas para dar gracias por tan buenos frutos.
El lugar fue todo un acierto: la iglesia de Santiago, hogar durante más de setenta años de las primeras escuelas salesianas en Carmona. Pasaban varios minutos de la una de la tarde, con algo de retraso por el gentío y el tráfico en los alrededores del vetusto templo, cuando don Fernando Báñez, consejero inspectorial para las obras gestionadas por seglares, dio comienzo, rodeado de salesianos y el clero local, a la eucaristía, acompañados de un numeroso grupo de acólitos, alumnos del centro.
En su homilía, Báñez hacía un repaso a modo de crónica, a tanta historia, dando gracias y pidiendo perdón si alguna vez se hicieron las cosas no tan bien como lo esperado. Y puso a Carmona como ejemplo de buena gestión, a pesar de no contar con comunidad salesiana desde hace más de treinta años.
Más de medio millar de personas acudieron a esta preciosa misa organizada y amenizada musicalmente por el Centro Juvenil ‘Uno Más’ de Carmona, que contó, además, con la presencia del claustro de ayer y hoy, alumnos, antiguos alumnos y miembros de la familia salesiana (ADMA, Asociación de Antiguos Alumnos y Salesianos Cooperadores), así como la representación de todas y cada una de las hermandades y cofradías de la ciudad.
En el banco de autoridades, el alcalde de la ciudad, Juan Ávila y el concejal de Turismo, Ramón Gavira, ambos antiguos alumnos, estuvieron acompañados por el director titular de la Casa, Óscar González. Este maravilloso pistoletazo de salida no es más que el comienzo de una serie de actos y eventos que culminarán ya avanzado el próximo año 2023. Y es que Carmona sigue respirando de salesianas maneras, así pasen los años.
Son ya 125 años los que iluminan la presencia salesiana en la historia de Carmona. Es por ese motivo por el que, desde este domingo 9 de octubre, a las 13:00, se dará el pistoletazo de salida a una celebración que tiene como punto de partida la eucaristía de inauguración que se celebrará en la Iglesia de Santiago de la localidad sevillana.
Allá por septiembre de 1897 llegaron a la ciudad los salesianos. Gracias a la generosidad de doña Dolores Quintanilla y Montoya, que cedió una casa en la calle Paso de la Condesa, se llegaron a construir cuatro clases en ese primer inmueble que sirvió como casilla de salida para un proyecto educativo y pastoral que pondría raíces y daría abundante fruto.
Tras una iniciativa de Escuelas Profesionales de Santa María de Gracia, no llevada a cabo finalmente, los salesianos consiguen unos terrenos para su nuevo colegio. Será junto a la iglesia de San Francisco, donde se desarrollará la labor salesiana desde 1957.
Será con Antonio Gutiérrez como director salesiano cuando se inauguran las instalaciones actuales de la casa salesiana de Carmona en 1970. A las afueras, en la carretera de El Viso, zona de expansión de la ciudad. La comunidad salesiana dejó la ciudad en 1989, siendo Carmona atendida posteriormente por la casa salesiana de Alcalá de Guadaira y luego por el Teologado y la casa inspectorial de Sevilla, así como la comunidad de Bartolomé Blanco.
Actualmente, la casa salesiana imparte educación infantil, primaria y secundaria. Siendo muy valorada la labor educativa de esta presencia en la localidad. No en vano, son miles los antiguos alumnos carmonenses que han pasado por su patios y que compartirán esta celebración durante los últimos meses en los diversos actos tras el lanzamiento del logo del 125 aniversario.
Carmona es la primera presencia salesiana de la Inspectoría de María Auxiliadora que cedió su labor a un equipo de seglares, educadores y animadores, que hasta hoy siguen compartiendo la misión salesiana. La labor pastoral y educativa de la comunidad educativa de Carmona está dejando constancia que el espíritu de Don Bosco sigue presente en esta tierra andaluza.