El pasado 8 de diciembre tuvo lugar la proclamación de la Iglesia de Salesianos Cádiz como Santuario. La celebración, presidida por Don Rafael Zornoza Boy, Obispo de Cádiz y Ceuta, despertó profundos sentimientos de fe y agradecimiento en los presentes, que abarrotaron el Santuario salesiano y vivieron una emocionante proclamación. Una jornada de encuentro para toda la familia salesiana y de la feligresía que tuvo una enorme relevancia y calado. En definitiva, un encuentro festivo de iglesia, histórico para la vida de la casa gaditana y de enorme significatividad para la ciudad.
Al inicio de la celebración, se llevó a cabo la lectura del acta de proclamación como Santuario. A su término, los congregados, en todo momento expectantes, rompieron en una enorme ovación. Posteriormente, don Rafael Zornoza tomó la palabra para referirse al templo como un lugar santo y de santificación, recordando el valor de la labor de los Salesianos en la ciudad e incidiendo en una fecha tan salesiana como la del 8 de diciembre. Además, resaltó los valores de María Inmaculada y quiso recordar como los cristianos siempre llamaron a la virgen como la que les auxiliaba, la Auxiliadora. Hubo también palabras de agradecimiento y de ánimo para todos los presentes, además de una sincera felicitación por tan significativo momento.
Cabe destacar que la Asociación de María Auxiliadora quiso tener un detalle con don Rafael que recibió, de manos de su presidenta, una imagen de María Auxiliadora. Reseñable es también la actuación del coro del Centro Juvenil Bosco, con cuyos miembros el Sr. Obispo quiso fotografiarse al finalizar la eucaristía. La participación de "Los Seises" y el posterior agradecimiento de Gustavo Martagón, director de la casa, a don Rafael, fueron otros de los elementos que compusieron esta única y especial celebración eucarística.
Para finalizar, el Sr. Obispo descubrió en la fachada del Santuario un azulejo conmemorativo de la proclamación, en lo que ha supuesto una jornada histórica para toda la familia salesiana.