Fernando Esparcia, administrador en la Fundación C.V. Nuestra Señora de La Piedad Salesianos El Campello.
Decidió dar un giro a su profesión y tras nueve años dedicado a la gestión en la banca, dejó su puesto de director en una oficina en Elche para orientar su trabajo hacia las personas. Ahí comienza su andadura en salesianos El Campello aunque su vinculación con Don Bosco viene ya desde niño, cuando estudiaba en Salesianos Alicante. Es salesiano Cooperador desde 2007. Lo que más le gusta de su trabajo es la oportunidad que le brinda en el día a día apoyar a los jóvenes y a entidades que les dan protagonismo.
Edad: 44 años
Un número: El 2 (tengo 2 hijos que han revolucionado y dado sentido a mi vida).
Una ciudad: Alicante, su sol de invierno es una suerte al alcance de todos.
Una canción: ¿Una? ¡Imposible! Siempre tengo alguna en la cabeza, me encanta ponerle banda sonora a las situaciones, a las personas, a la vida.
Un libro: Cualquiera de Roberto Bolaño o de Ray Loriga.
Una película: 2046.
¿Qué personaje de serie te gustaría ser?: Sin series, conseguir ser la mejor versión de mi mismo.
Aficionado a: Disfrutar de la montaña.
Comida favorita: Italiana.
Algo que no te quitas nunca: Una pulsera del centro juvenil Tucumán 7 en la que se puede leer “siempre alegres” DB. También la llevan mi mujer y mis dos hijos.
Una cualidad: La serenidad.
Un recuerdo de verano salesiano: La preparación de los campamentos con Rosendo Soler y el resto del equipo, eran unos días de terrible calor, sacando trastos y tiendas de campaña del almacén, preparando materiales y cajas, actividades, talleres, juegos … era todo creatividad, ilusión, dias en blanco a programar, a disfrutar… y días después la magia del campamento.
La verdadera amistad: Estar ahí, a pesar de la distancia y del tiempo, a pesar de disponer de poco tiempo para compartir.
El amor más puro: El de mis dos hijos.
La mejor experiencia en clave salesiana: Haber participado en la fundación de la AJDB, fueron unos años intensos en los que Dios puso en mi vida a personas que han sido y son a día de hoy referentes en mi trabajo, en mi camino de fe, en mi vida. En aquellos años conocí esta Casa gracias a las acampadas ADS y los Campoboscos.
Es posible renunciar a todo por: Hacer feliz a los demás.
Si volvieras atrás: Pasaría más tiempo con mi familia.
Un lema: Yendo contigo nada me inquieta, marcho con paz y fuerza; yendo contigo todo se espera, cada mañana es nueva.
Algo que cambiarías del mundo: La desigualdad social.
María Auxiliadora: Sin Ella todo esto pierde sentido.
La vocación en pocas palabras: Llamada, impulso, fuerza que da sentido y se mantiene a pesar de todas las adversidades.
Un deseo: Que nos creamos de verdad que todos somos hermanos.
Un pasaje de la vida de Don Bosco: La visita y el acompañamiento a los jóvenes en las cárceles de Turín.
Un mensaje dirigido a los jóvenes: El futuro está demasiado cerca, no pierdas el tiempo, no te dejes llevar y lucha por lo que amas. Construye tu vida sobre unas pocas rocas sólidas y sé el protagonista en primera persona.