Si las fábulas son historias protagonizadas por animales que viven situaciones de las cuales, después, se puede extraer un aprendizaje moral, podríamos decir que La Crónica de la Iu Eskar de David Nel·lo es una simpática fábula sobre aquellos que se ven empujados a abandonar sus hogares para buscar una nueva vida. El problema es cuando allá donde quieren establecerse para empezar de nuevo no son bienvenidos.
Los animales que elige Nel·lo para su novela galardonada con el premio Edebé de Narrativa Infantil 2020, no son precisamente del estilo ni la tradición literaria de Esopo. Iu, el protagonista, es un escarabajo que, junto con su extensa familia, se verá obligado a abandonar la casa de la señora Faristol, donde siempre han vivido, si no quieren morir fumigados. Aquí empieza un duro éxodo no exento de las ratoneras de las mafias ni de la muerte, hasta que llegan al Hotel Apolo, donde tendrán la intención de establecer su nuevo hogar. Desgraciadamente, el hotel no está desocupado. Allí viven otros escarabajos, los Blattella, que no son parecidos a los escarabajos de la familia Eskar. Los Blattella son más rubios y algo más pequeños, en cambio los escarabajos de la familia de la Iu son negros.
Esta diferencia insignificante, resultará ser el pretexto de un desprecio y un trato discriminatorio que tiene por cimiento la idea que “El Hotel Apolo es nuestra patria, la patria de los Blattella!”. Y esto solo porque estos estaban de antes y ven a los recién llegados como una amenaza.
Una novela perfecta para entrar en diálogo con vuestros hijos o alumnos sobre temas como los refugiados, las migraciones internas o externas que uno pueda vivir, la xenofobia o las ideologías populistas sobre la “propiedad” de las patrias. Quién habría dicho que los escarabajos podrían acabar resultándome simpáticos.