Por Rocío Cano.
La Crónica Inspectorial nos aporta esta descripción literal de los hechos
¨El día 10 de noviembre, a las siete de la tarde, llegamos al nuevo Colegio de La Palma del Condado la Comunidad y los Aspirantes Latinistas, que abandonaban definitivamente la casa de Consolación(Utrera)… la llegada fue cariñosa y acogedora¨
Don José López Verdugo, Director del Seminario Menor de Utrera, recuerda que ¨sin pretenderlo se organizó una numerosa y fervorosa procesión del Corpus desde la Parroquia hasta el Colegio… desde el primer momento se estableció una empatía entre palmerinos y salesianos¨
En diciembre de 1961 una de las noticias más impactantes fue la de los tremendos aguaceros caídos en la localidad. Desde el primer momento se socorrieron a los necesitados y desde el colegio se creó la Operación ¨¡Leña al cura!¨, con el fin de hacer posible la preparación de 500 almuerzos diarios para los afectados.
Con la llegada del nuevo año, 1962, vino la calma…aunque relativa ya que empezaron en el Colegio las primeras gestiones para la fundación de sus principales células: la Asociación de Antiguos Alumnos, el Oratorio Festivo y la Archicofradía de María Auxiliadora.
Esta empatía, que durante casi 60 años de presencia salesiana en La Palma del Condado, ha crecido y ha hecho que el Colegio sea un referente en el pueblo. Incluso el movimiento salesiano inspiró una escuela de fútbol de la localidad y tiene el nombre de ¨Siempre alegres¨. La comunidad educativa tiene un gran cariño y fervor a la advocación de María Auxiliadora creciendo de manera exponencial desde hace unos años y que va a llevar a su Coronación Canónica.