La inspectoría salesiana María Auxiliadora presentó un nuevo canal de comunicación en la cuenta de correo recordandoacesar@salesianos.edu con el objetivo de canalizar noticias, testimonios y vivencias compartidas con el misionero salesiano Antonio César Fernández.
"La creación viene propiciada gracias al masivo envío de numerosas personas que están mandando cartas, mensajes por WhatsApp o comentarios a raíz de lo vivido y queremos ir recogiendo todas esas noticias. Por otra parte, también viene motivada por la petición de parte del Nuncio Apostólico de ir elaborando un dossier con testimonios escritos, gráficos y audiovisuales sobre nuestro hermano César", explica Alejandro Guevara, delegado de Familia Salesiana y salesiano que acompañó a la familia del salesiano asesinado en África durante los funerales celebrados en Togo y Pozoblanco.
El funeral en España, celebrado el pasado 24 de febrero, estuvo presidido por el Obispo de Córdoba, Monseñor Demetrio Fernández González, que compartía palabras de consuelo para la localidad con el recuerdo para una persona que tuvo clara desde muy joven su vocación de servir a los más necesitados, motivo por el que llegó a Togo para fundar la primera presencia salesiana en el país. “Su muerte nos ha hecho pensar. Ha hecho un gran bien para la Familia Salesiana y para todos los que han recibido su testimonio. Si durante su vida fue un gran apóstol, en su muerte lo ha sido aún más. Ha sido una donación final con una entrega sostenida durante toda su vida. Por eso se hizo salesiano y por eso pidió marchar a África donde pudo acompañar a jóvenes en situación de riesgo. Él no habría estado allí si no hubiera elegido vivir su día a día como misionero”, expresaba.
Miguel Ángel Olaverri, obispo salesiano en la Diócesis de Punta Negra en el Congo, compartió algunos recuerdos vividos con César durante la época fundacional de la presencia salesiana en Togo. “Fue un momento de comunión, como refleja hoy esta celebración en la que están presentes cuatro inspectores salesianos y se representan los más 1300 salesianos de África”, compartía. Además, trasladó el clamor vivido días atrás en Lomé donde se destacaba la figura de César como un mártir que llegará a los altares. “Con la llamada del Papa Francisco a la santidad, me ha gustado escuchar en la Familia que hoy se entierra a un santo. Tenemos que identificar a esos santos que viven hoy junto a nosotros y nos acompañan”, añadía.
"Podría contar unas cuantas anécdotas verídicas, auténticas, protagonizadas por nuestro admirable compañero Antonio César Fernández, santo y que podríamos llamar mártir. Sí, ya era un santo cuando se preparaba para entrar en la congregación salesiana. Probablemente, en su cándida simpatía, el mejor religioso de los que allí estábamos. En mi trato con él me recordaba a Santo Domingo Savio, San Luis Gonzaba. Nadie que lo conociera podría quejarse de él ni serle indiferente. Porque era la bondad en persona, el desprendimiento y la generosidad mayor que he conocido". Así se comparte un recuerdo de 1962 en uno de los fragmentos enviado por José Matías Gil González entre los muchos testimonios enviados tras conocer la noticia de su muerte.
Gracias a esta cuenta de correo creada se podrán centralizar los testimonios y aportar materiales a los salesianos de la inspectoría salesiana África Francófona Occidental que en los próximos meses visitarán los lugares por los que César pasó. Allí se encargarán de recoger testimonios vivos y donativos para la obra que César estaba desarrollando en Burkina Fasso, y con la que muchas personas colaboraban, pueda seguir adelante.