Rafael Casasnovas i Cortés, salesiano sacerdote (1927-2020)

4 abril 2020

La Inspectoría Salesiana María Auxiliadora comunica que, hacia las 20:30 del sábado 4 de abril, falleció en la Residència Mare de Déu de la Mercè, de Barcelona-Martí Codolar, el querido hermano salesiano sacerdote don Rafael Casasnovas i Cortés. Tenía 92 años de edad y había cumplido los 74 de salesiano y los 65 de sacerdote.
 

Don Rafael nació en Ciutadella de Menorca, el 12 de agosto de 1927. Hizo el Noviciado en Sant Vicenç dels Horts, donde profesó el 16 de agosto de 1945. Los estudios de filosofía los cursó en Girona (1945-47). El tirocinio lo realizó en Valencia-San Antonio Abad (1947-50). Su profesión perpetua tuvo lugar en el Tibidabo el 12 de octubre de 1950. Siguieron cuatro años (1950-1954) de estudio de la teología en Turín-Crocetta. Y el 1 de julio de 1954 fue ordenado presbítero por el Cardenal Fossatti en la Basílica de María Auxiliadora de Turín. Los dos años siguientes (1954-56) siguió con los estudios de teología en Turín-Crocetta, preparándose para ser el profesor que muchos de nosotros hemos conocido, querido y admirado.

 

De 1956 a 1984 desarrolló su labor pastoral como profesor de teología en Martí-Codolar. En medio de esos años, el curso 1974-75 lo vivió en Cremisan-Belén-Israel perfeccionando sus estudios bíblicos. Estuvo en Barcelona-Don Bosco-Navas (1984-91), en Barcelona-Sant Jordi (1991-95), en Barcelona-Sant Àngel (1995-97), en Barcelona-Sarrià (1997-2011), en Barcelona-Horta (2011-2013) y en Barcelona-Martí Codolar (2013-2017). Desde principios de 2018 se encontraba en la Residència Mare de Déu de la Mercè, donde ha fallecido.

 

Don Rafael Casasnovas será recordado como buen salesiano, hombre de paz y cariñoso. Ha sido quien más cercano ha estado a la familia Martí-Codolar a lo largo de los años, trabajando intensamente en la historia de la casa. Profesor de teología centrado en la Mariología, propagó siempre el amor a María en sus predicaciones, conferencias, cursos y congresos.

 

Que el Señor Resucitado acoja con ternura al hermano Rafael entre todos aquellos que han entregado su vida a la misión salesiana; y que María Auxiliadora, a la que tanto amó, lo acoja con el cariño de Buena Madre del cielo.

 
Que descanse en paz.
 
 

También te puede interesar…