El Papa Francisco celebra en este momento de la historia, con la gran pandemia que hace estragos en muchas partes del mundo y que ha confinado a otros millones a vivir encerrados; a que podamos tejer historias. “El acto de contar es esencialmente humano – Escribe S. Kohan –Sentimos necesidad de contar lo que nos pasa y lo que les pasa a otros para encontrar el sentido de la vida”. El Papa invita a contar “historias que ayuden a reencontrar las raíces y la fuerza para avanzar juntos”, más aún, nos “anima a narrar y compartir historias constructivas que nos ayuden a comprender que todos somos parte de una historia más grande que nosotros mismos”.
“En medio de la confusión de las voces y de los mensajes que nos rodean, necesitamos una narración humana, que nos hable de nosotros y de la belleza que poseemos”, explica el Papa. En efecto, el mundo de hoy vive una crisis muy grande que acontece a raíz del Covid-19, sin embargo; encontramos un mundo solidario, comprometido, capaz de mirar a los pobres y a los más necesitados. En una carta del P. Gildasio Dos Santo Mendes, Consejero de Comunicación, enviada a todos los responsables de Comunicación de la Congregación Salesiana, agradece “el coraje y la creatividad por comunicar a través de las redes sociales y de los diversos medios de comunicación, la fuerza del amor y la solidaridad”.
El día 24 de mayo de mayo, el Papa Francisco ha recordado la hodierna Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales y ha invitado a “tejer historias”. “Desde la infancia tenemos hambre de historias. Las historias influyen en nuestra vida… Sumergiéndonos en las historias, podemos encontrar motivaciones heroicas para enfrentar los retos de la vida”.
“No todas las historias son buenas”, porque están plagadas de historias “que nos narcotizan, convenciéndonos de que necesitamos continuamente tener, poseer, consumir para ser felices. Casi no nos damos cuenta de cómo nos volvemos ávidos de chismes y de habladurías, de cuánta violencia y falsedad consumimos”. Por ello se nos estimula a tener el valor de la “paciencia y el discernimiento para redescubrir historias que saquen a la luz la verdad de lo que somos”.
En este entrelazado de historias se nos presenta la Biblia como “la gran historia de amor entre Dios y la humanidad. En el centro está Jesús: su historia lleva al cumplimiento el amor de Dios por el hombre”
Muchos de los hombres de marketing de hoy darán la razón al Papa porque los niños y jóvenes de hoy se comunican, se promocionan contando “historias”. El Papa dice: “No se trata, pues, de seguir la lógica del storytelling, ni de hacer o hacerse publicidad, sino de rememorar lo que somos a los ojos de Dios”.
