Lo que esos documentos traslucían no era la figura de un hombre bueno, sino la figura de un santo! Y ese es el convencimiento que de forma cada vez más firme ha enraizado en mi interior.
Me impresionan de él muchas cosas:
– No solo tiene buenas intenciones y el impulso ocasional de intentar hacer una buena obra, de escuchar y dar palabras de ánimo a quien lo necesita, lo que ya de por si es bueno. Él va más allá al realizar muchas obras buenas, al ayudar de manera real y efectiva, día tras día, año tras año, a las mujeres enfermas y parturientas, a los leprosos, a los niños, ancianos, seminaristas, monjas de clausura y personas de distinta procedencia que acuden a él pidiendo ayuda. Esto, unido a que es muy parco en palabras me hace pensar muchas veces en esas frases del evangelio “Por vuestras obras conocerán que sois mis discípulos” y “Mas en las obras que en las palabras”.
– Supongo que tendrá dudas de vez en cuando, que se cansará, pero no lo parece. Es como un sabio del renacimiento, incansable, hace muchas cosas y en todas ellas busca la excelencia: como médico, como alcalde, como benefactor, como padre de familia. Es como si siempre tiene claro lo que hay que hacer, y no titubea ni busca excusas, ni se cansa con los años, ni se permite descansar o perder el tiempo. Se organiza el día con horario espartano y lo cumple metódicamente siempre, durante años. Parece imposible que tenga tiempo material para hacer todas las cosas que hace, tan variadas y con tantas personas diferentes.
– Y aunque no aparece así explícitamente en ningún sitio, creo que puede deducirse que sus prioridades, a las que siempre fue fiel a lo largo de su vida, están muy claras: Primero Dios y la Iglesia, después su profesión médica y sus enfermas, luego otros necesitados de diversa índole, después su querida ciudad de Málaga, que nunca quiso abandonar, a continuación su familia, y por ultimo él.
– Me impresiona como en los tristes momentos de la guerra civil, que en Málaga fueron especialmente duros, estando el muy identificado con uno de los bandos por ser cristiano y suegro de dos aviadores significados del bando nacional, habiendo estado una de sus hijas presa del bando republicano, y habiendo sido él mismo detenido en los primeros meses, durante la guerra ayuda a personas en peligro de ambos bandos. Y después se presenta voluntariamente en varios Consejos de Guerra para testificar en defensa de republicanos de los que le constaba habían actuado rectamente. No se deja llevar por el sectarismo dominante, ni por la opinión de sus allegados, ni se desentiende de los problemas una vez que se ve él y a su familia fuera de peligro, sino que actúa siempre conforme a su conciencia y a lo que considera justo. Ahora que tanto se habla de memoria histórica, también se podían recuperar testimonios como este, que se dieron en ambos bandos y que intentaron paliar el dolor que causo la guerra.
– También me gusta cómo siendo un hombre de su tiempo en cuanto a tradición familiar, educación y formación, es muy moderno y adelantado no solo en cuanto a técnicas profesionales y conocimiento de idiomas, sino en cuanto a su gusto por el deporte y en su defensa de las mujeres, creando la escuela de matronas, proponiendo la construcción de la maternidad de Santa Cristina y siendo el primer alcalde que elige a una mujer como concejala en Málaga.
– Me atrae su personalidad: trabajador, activo, constante, tenaz, persuasivo, con la palabra siempre justa, pues habla poco, pero cuando hay que hablar no se calla, austero, imponente, con fino sentido del humor, culto, deportista, buscando siempre lo mejor para sus enfermos, para las obras de caridad que realiza, para su querida Málaga…
¡Me habría encantado conocerle!
Miren Larrea, bisnieta del Dr. Gálvez.