El Pleno Municipal de Pozoblanco aprobó en enero de 2020 que una calle del municipio llevaría el nombre del padre César Fernández. El alcalde de Pozoblanco, Santiago Cabello, inició los trámites administrativos a través de un decreto de alcaldía hace varios meses para que este reconocimiento fuera una realidad en memoria del misionero salesiano, asesinado en un ataque yihadista el pasado 15 de febrero en la frontera sur de Burkina Faso, en África.
En la tarde del 23 de mayo de 2021, coincidiendo con la víspera de la fiesta de María Auxiliadora, se hacía realidad este homenaje en la localidad en un acto que contó con la intervención de Manuel del Rosal, director de la presencia salesiana, Miguel Canino, coordinador de Escuelas y representante del Consejo de la Inspectoría Salesiana María Auxiliadora, además de familiares de César destacaron la labor de este sacerdote con una vida dedicada siempre a los más desfavorecidos sin esperar nada a cambio. «Es un ejemplo para todos los pozoalbenses, por lo que su recuerdo debe de quedar para siempre en nuestra localidad y en nuestra memoria”, se compartía.
El salesiano Antonio César Fernández había nacido en Pozoblanco el 7 de julio de 1946 y había ejercido como misionero en diversos países de África desde 1982, pues fue fundador en dicho año de la presencia salesiana en Togo, su primer destino. A lo largo de su trayectoria trabajó como maestro de novicios (1988-1998) y ejerció, entre otras funciones, como delegado de la Inspectoría Salesiana Fracófona (AFO). En la última etapa de su vida ejercía su ministerio en Burkina Faso, aunque seguía visitando Pozoblanco, donde reside su familia, con regularidad. Murió con 72 años y cuando había cumplido los 55 de salesiano y los 46 de sacerdote.
Antonio César Fernández fue tiroteado por los yihadistas a 40 kilómetros de la frontera sur de Burkina cuando regresaba de un viaje por carretera. Dicho ataque se enmarca dentro de la ola de violencia que padece Burkina Faso desde el año 2015. Los restos del misionero descansan en el panteón de los salesianos del Cementerio de Pozoblanco, localidad en la que, tras la repatriación de su cadáver, don César fue despedido con un multitudinario funeral.