Alrededor de cincuenta educadores y catequistas han recibido la formación de los Cursos de acompañamiento que se han llevado a cabo en las tres sedes de la Inspectoría. Los cursos que se han desarrollado en cinco sábados a lo largo de todo el curso, comenzaron en noviembre y finalizaron en abril. Según el delegado inspectorial de Pastoral Juvenil, Francisco José Pérez: “Sin acompañamiento personal es imposible que el proceso de personalización se pueda dar, ya que éste exige un proceso de interiorización, de toma de conciencia, de hacerse cargo de si mismo, de interrogarse y de contrastar con el acompañante”.
Los objetivos fijados para todas las sedes han sido: despertar la inquietud por el acompañamiento educativo-pastoral de jóvenes, descubrir la necesidad de acompañar y ser acompañados a nivel personal, dar respuesta a esta necesidad en los ambientes de la Pastoral y hacer visible el acompañamiento personal en la propuesta de la Pastoral Juvenil Salesiana, en consonancia con las orientaciones pastorales de los salesianos e Hijas de María Auxiliadora. “Además, se va creando un buen grupo de personas de todas las casas muy sensibles al tema del acompañamiento y se va tejiendo una red de experiencias que se comparten” añade Pablo Gómez, coordinador del curso en Valencia.
La unidad temática en las tres tandas, marcada y supervisada por el centro nacional de pastoral, ha garantizado la iniciación de los participantes sobre temas como la Escucha y la calidad de la relación; Adolescentes y jóvenes, psicología para educadores; Jesucristo nos enseña a acompañar; Don Bosco y Madre Mazzarello Acompañan a los jóvenes; Afectividad y sexualidad; Aprender a decidir, entre otros temas.
En el curso desarrollado en Valencia, 19 alumnos, catequistas de parroquias, educadores de Plataformas sociales, monitores del centro juvenil, profesores de colegios, animadores del Itinerario de Educación en la Fe, disfrutaron del curso. En el curso desarrollado en Sevilla participaron 18 alumnos y en Barcelona, lo cursaron nueve educadores.
En la sede de Valencia el curso así establecido lleva tres ediciones. “La experiencia está siendo muy positiva, y hay mucha demanda porque el tema del acompañamiento poco a poco va entrando en nuestra manera habitual de hacer las cosas. Además de enseñar, es un curso que anima a ponerse manos a la obra con el acompañamiento a los que no han empezado, y refuerza a los que ya se estaban iniciando. Así que en principio seguiremos ofertando el curso los años que vienen” añade el coordinador de Pastoral.
