Durante el mes de diciembre numerosas casas salesianas convierten sus instalaciones en la aldea de Belén. Los patios cobran vida y se acercan a la realidad de la época en la que nació Jesús. Alumnado, familias, educadores y personal de administración y servicios, entre otros grupos y ambientes de las presencias salesianas, protagonizan al unísono el milagro de la Navidad llevando más allá de las redes sociales el mensaje #YoPongoElBelén.
Ciudades como Rota, Córdoba, Badalona, Burriana, La Línea, Algeciras, Palma del Río, San José del Valle, Pozoblanco, Ibi o Granada son una pequeña muestra en las que se pueden encontrar desde una panadería hasta una herrería, pasando por el telar, zapatería, taller de artesanía, la carpintería e incluso una posada o el castillo de Herodes. Estas aldeas salesianas se han convertido a lo largo del tiempo en toda una atracción local, superando cada año el número de asistentes. Una cita que pone de manifiesto la perfecta comunión entre familias y “protagonistas” que, codo con codo, dedican mucho tiempo, esfuerzo e ilusión a que cada año se haga realidad, creando un estupendo clima de convivencia, el cual, hace que esta actividad sea más especial aún si cabe.
En Salesianos Rota el Belén viviente ha conseguido ser una de las actividades más esperadas de la Navidad. Organizadas por la casa salesiana, con la colaboración de la Hermandad del Santo Entierro y el ayuntamiento de la ciudad, se traslada a las calles céntricas de la localidad donde pueden verse largas. “Desde la plaza de España hasta Bartolomé Pérez se transformaron en calles de Belén con una amplia representación que da vida a las escenas más representativas en torno al nacimiento de Jesús”, comparte el salesiano Mario Pardos sobre una actividad en la que pueden contemplarse los pasajes más típicos, como la anunciación del Ángel a María, la búsqueda de la posada de María y José, la decisión de Herodes o la adoración de los Reyes Magos.
Por otra parte, la casa salesiana de Córdoba celebró el pasado sábado 17 de diciembre su gran belén viviente, en el que participaron todos los alumnos desde primero a sexto de Primaria. Como es tradición, en el nacimiento se representaron distintas escenas como la anunciación, la adoración de los Reyes Magos o el misterio, y no han faltado los pastores o las lavanderas. En el montaje participó toda la Familia Salesiana. “A principios de noviembre se sortearon las escenas, que han sido trabajadas entre alumnos y profesores en las aulas, y que han contado con la ayuda de las familias”, explicaban.
En Salesianos Badalona toda la comunidad educativa protagoniza el Belén Viviente siendo una jornada participativa. Además, el alumnado de 4º de ESO, durante este primer trimestre, ha elaborado el nuevo pesebre trabajando el porexpán, la escayola, la pintura de pigmentos, la acrílica, los aceites e inspirándose en una de las siete maravillas del mundo. Junto al Machu Picchu se han intentado añadir el máximo número de detalles posibles (olivos, calabazas, lechugas, abetos…) todo con la ayuda del profesor de la optativa de visual, Joan Mola Gibert.
El Belén Viviente de Salesianos Burriana llega a su décima edición tras un paréntesis de dos años como consecuencia de las restricciones derivadas del Covid-19. Los patios del colegio volverán a vivir esta alegre y festiva representación, en la que toman parte los 439 alumnos de Infantil y Primaria, junto a sus educadores, así como los 65 de segundo de Bachillerato, en su último año en el centro. Esta muestra navideña incluye los bailes ensayados por cada clase de Infantil con canciones navideñas, recreando diferentes animales del pesebre e implicando a las familias en los disfraces, decorados y preparativos. Además, los alumnos de Primaria escenificarán varios pasajes del Nacimiento de Jesús, mientras otros grupos cantarán villancicos y los acompañarán con instrumentos musicales.
En Salesianos San José del Valle han celebrado la segunda edición donde el alumnado dio vida a las distintas escenas formando un precioso paisaje para disfrute de todos los visitantes.»Como dice el Papa Francisco, el belén nos hace ver, nos hace tocar este acontecimiento único y extraordinario que ha cambiado el curso de la historia. El corazón del pesebre comienza a palpitar cuando, en Navidad, colocamos la imagen del Niño Jesús. Dios se presenta así, para ser recibido en nuestros brazo», compartían agradeciendo la colaboración de todas las personas que lo hicieron posible.
En Salesianos Pozoblanco el eje de la celebración estaba en la Casa Pinardi que abría sus puertas para dar la bienvenida al Belén Viviente solidario con un recorrido compuesto por 270 personas con un decorado muy trabajado y con detalles tan llamativos como las costumbres gastronómicas de la comarca de Los Pedroches. «Esta iniciativa permite conocer el espacio de uso social de la casa salesiana, inaugurado en 2018, y que estos días retrocede en el tiempo para acoger en sus diferentes dependencias escenas claves y ser una extensión de la ‘operación kilo’ que se viene desarrollando en el centro en estas últimas semanas para conseguir comida que irá destinada a Cáritas», explicaban desde la casa salesiana.
Salesianos Granada estrenó por primera vez esta modalidad con un fin solidario. «Todo un éxito del Primer Belén Viviente en nuestro colegio organizado por el coordinador de Catequesis Juan Manuel Jaldo y los catequistas de nuestra casa. Enhorabuena a los organizadores y participantes y a todos los que han asistido aportando como entrada kilos de comida», compartían.
Hace ya tres años que Salesianos La Línea celebró por última vez su ya conocido Belén Viviente. Según representantes de la casa salesiana, esta quinta edición ayuda a vivir de una manera más cercana y cristiana el nacimiento del niño Dios en nuestros corazones. “Lo que comenzó como un proyecto dentro del colegio es ya un referente público en la ciudad para las fechas que se aproximan. Cada grupo de la casa se encarga de trasladarnos al mismo pueblo de Belén con la escenografía, decoración y caracterización al mínimo detalle. Un proyecto que cada año sigue adelante gracias a la colaboración de empresas privadas, al ayuntamiento y, por supuesto, al trabajo e ilusión de los alumnos, sus familias y miembros de la Casa Salesiana”, explicaban.
Estas representaciones son sólo una pequeña muestra de que en las casas salesianas se espera con ilusión la Navidad, para celebrar que el Nacimiento de Jesús abre caminos hacia Dios y hacia los demás.
