El Colegio Salesiano de Úbeda ha puesto en marcha la exposición “Úbeda, sentir para ver”, que forma parte del programa de innovación educativa de la Junta de Andalucía “Vivir y sentir el patrimonio”. A la inauguración acudió Palmira González, responsable provincial de los planes y programas de innovación educativa de la junta de Andalucía, y diferentes miembros de asociaciones de personas con necesidades especiales como ONCE, APROMPSI, Asociación Síndrome de Down Jaén y la Asociación provincial de Autismo de Jaén “Juan Martos Pérez”.
El alumnado de 2º, 3º y 4º de secundaria ha creado un pequeño museo recopilando los trabajos que han realizado en diferentes áreas como Geografía e Historia, Plástica, Lengua, Matemáticas, Inglés, Latín, Música… Un proyecto multidisciplinar que ha dado como resultado una exposición sensorial. Esta muestra tiene como finalidad hacer de nuestro patrimonio algo verdaderamente Universal e integrador, enfocada para niños y adultos con necesidades especiales. Para ello, el centro ha contado con el asesoramiento de diferentes organizaciones especializadas.
La exposición se centra en la etapa renacentista de la ciudad de Úbeda y consta de varios espacios, cada uno dedicado a un sentido. A través del tacto y la vista se puede disfrutar de las maquetas realizadas en diferentes materiales y tamaños (yeso, impresiones 3-D, cartón reciclado…) todo ello acompañado de una audioguía explicativa de cada uno de los monumentos expuestos, a la que se accede a través de un código QR. Gracias a un paisaje sonoro se pasea por la ciudad renacentista a través de los diferentes sonidos que habría por la época. Con el olfato, se descubre el tipo de cultivo que teníamos en los campos que rodeaban la ciudad de los cerros. Y un apartado infantil muestra a través de cuentos adaptados cómo ha sido la historia de nuestra ciudad.
En definitiva, una exposición que pretende romper barreras de accesibilidad, sensibilizando a todos los públicos de las maravillas de nuestro patrimonio. En esta muestra todo se puede tocar, ver, oír… en definitiva, todo se puede sentir. El público asistente a la inauguración así lo ha demostrado, disfrutando de cada una de las piezas y ensalzando el trabajo de los alumnos que han elaborado el proyecto.
