La tarde del viernes, el “camet” se convirtió en un gran escenario de música, ritmo y color. El alumnado de Salesianos San Vicente Ferrer representó diferentes actuaciones realizadas con mucha ilusión y dedicación. Se trata de un año especial ya que es el 90 aniversario de la llegada de los salesianos a Alcoy.
El nexo de unión entre las diferentes actuaciones fue precisamente el 90 aniversario. De esta manera, el alumnado de infantil dedicó su puesta en escena a los salesianos presentes en diferentes países a lo largo de los continentes. Por su parte, las diferentes representaciones de primaria estuvieron referidas a los ambientes salesianos: centro juvenil, scouts, deporte, etc. Por lo que se refiere a los alumnos de secundaria, estos se centraron en los distintos estilos de música que forman parte de las diferentes décadas desde la llegada de los salesianos a finales de los años 20 del siglo pasado hasta la actualidad.
Cabe destacar también la introducción al festival que fue diferente a la de otros años: en ella se hizo una representación realizada por alumnos de quinto y narrada por profesores, en que se contaba cómo fue la llegada de los salesianos a Alcoy, cosa que forma parte de la historia no solamente de nuestro colegio sino de nuestra ciudad. Esta acabó con un baile. A continuación, se cantó “l’himne del Patronat” tradicional en nuestros festivales, que hace también referencia a nuestro pasado y a los comienzos de nuestro colegio con la figura también importante de Mossén Josep. Hay que destacar las palabras del director de agradecimiento a las familias y la presentación del festival por parte de alumnos de 1º de primaria y de 4º de la ESO.
En referencia a los motivos que adornaban el “camet”, la profesora de plástica y el alumnado realizaron diferentes carteles referidos al 90 aniversario, al santuario y a las diferentes actuaciones.
Por último, remarcar la cena de sobaquillo organizada por el AMPA en el pórtico al término del festival. Fueron muy numerosas las familias que participaron en este, el cual fue amenizado por una sesión de magia y por una disco móvil.
En definitiva, un gran despliegue de trabajo, de ilusión, de luz y de música en una tarde soleada y en una noche del mes de mayo que no olvidaremos nunca. Esta forma parte ya de nueslatra historia de Salesianos Alcoy y les proyecta más si cabe, de cara al futuro.