Como cada año, la Asociación de Antiguos Alumnos de nuestro Colegio tuvo la fiesta de la Unión. El sábado pasado comenzó la Jornada con la degustación de una paella solidaria preparada por el Club Amigos. Luego fueron llegando el torneo de guiñote, los juegos para niños y la cena de bocata en el pórtico que dieron a la tarde noche del sábado un extraordinario ambiente familiar en el patio.
El domingo llegó el día grande. A las doce del mediodía se celebró la Eucaristía presidida por Rufino animada musicalmente por el coro de Antiguos Alumnos. A la una del mediodía, en la Sala de Medios tuvo lugar el acto de homenaje a los antiguos alumnos veteranos.
Faustino Belenger, Jesús Polo y José Manuel López fueron los homenajeados. La vida salesiana de estas personas fue presentada a través de vídeos de cuatro minutos en los que, de un modo extraordinario, se narraba su historia personal, su paso por la Casa y la influencia que los Salesianos habían dejado en su vida. Combinando fotografías con imágenes de los protagonistas en la actualidad, los vídeos llegaron al corazón del público y le hicieron entender el gran amor que los homenajeados han tenido y tienen a los salesianos.
Sorprende que, como tantos otros uno de ellos, José Manuel, no estudiara en el Colegio, y es que la expresión “Antiguo Alumno” no tiene connotaciones únicamente académicas; todo aquel que de un modo u otro ha pasado por la Obra Salesiana (el Colegio, el Club, la Parroquia…) puede afianzar más su sentido de pertenencia siendo socio de La Asociación. Los Salesianos de Huesca nunca han tenido una vida exclusivamente escolar; siempre ha sido una casa abierta en la que lo educativo pastoral ha estado presente en todas las secciones.
En este acto se homenajea también a un salesiano que ha entregado años de su vida en la casa; esta vez fue Rufino, actual titular del Colegio, quien recibió el cariñoso agradecimiento de los presentes; también un vídeo presentó la vida de este salesiano que diariamente está presente entre los niños y los profesores para animar la vida escolar del Centro.
La comida, servida por jóvenes monitores del Club, y la Salve en la Iglesia pusieron el colofón de una fiesta entrañable que, no por casualidad, se celebra antes de María Auxiliadora.
La Asociación de Antiguos Alumnos de Huesca tiene una vida extraordinaria. Durante todo el año son muchas las actividades que organiza potenciando así la continuidad en la Casa Salesiana de todos aquellos que se han ido educando en la misma durante su infancia y adolescencia.
