Salesianos Cooperadores
Pensó entonces en unirlos y asociarlos. Finalmente, San Juan Bosco fundó la Asociación de los Cooperadores el 9 de mayo de 1876, en Turín.
Los Salesianos Cooperadores son hombres y mujeres católicos, laicos o sacerdotes del clero diocesano quienes atraídos por la figura de Don Bosco, viven en sus hogares y en sus trabajos profesionales el mismo carisma de la Sociedad de San Francisco de Sales y ofrecen su cooperación a los obispos y párrocos así como a las comunidades de religiosos salesianos, Hijas de María Auxiliadora y otras ramas de la Familia Salesiana, trabando especialmente en los oratorios, centros juveniles, escuelas y plataformas sociales.
Ser Salesiano Cooperador es una vocación recibida de Dios y requiere una camino de preparación antes de realizar la promesa de ingreso en una asociación local.
Las tres dimensiones del ser Salesiano Cooperador, según se recoge en su “Proyecto de vida apostólica” son:
Primera: la vocación, que es la común llamada de los bautizados impregnada por el carisma Salesiano.
Segunda, la laicidad, o sea vivir los compromisos cotidianos como espacios para testimoniar y animar con los valores evangélicos y salesianos las realidades humanas.
Tercera: la salesianidad, o sea el patrimonio de valores espirituales y pedagógicos dejados en herencia por Don Bosco y Madre Mazzarello: el espíritu salesiano, que es una experiencia evangélica típica que caracteriza y da un tono concreto a la presencia y acción en el mundo, al trato con los hermanos y a la relación con Dios.
En la actualidad, los Salesianos Cooperadores son cerca de treinta mil y están distribuidos en once regiones, formando “provincias” al interno de las mismas. La Asociación, fiel a la voluntad del Fundador, tiene una estructura flexible y funcional, fundada sobre tres niveles de gobierno: local, provincial y mundial. Con esta organización se asegura la eficacia de la acción sobre el territorio y la apertura a la universalidad de la comunión y de la misión.
Los Salesianos Cooperadores en España están divididos en seis provincias, siendo siete en la Región Ibérica al sumarse Portugal. En la Inspectoría María Auxiliadora se encuentran tres provincias: la de Barcelona, la de Valencia y la de Sevilla.