Desde la Inspectoría Salesiana María Auxiliadora se comunico que en la mañanda del 25 de febrero fallecía elel herma salesiano sacerdote don Manuel Manso González, en el Hospital Quirónsalud Infanta Luisa de Sevilla. No ha podido superar el agravamiento de su bronquitis y de su complicada situación de salud. Tenía 82 años de edad y había cumplido los 64 de salesiano y los 54 de sacerdote.
La misa exequial tendrá lugar el lunes 26, a las 11:00, en la Basílica de María Auxiliadora de Sevilla. El domingo 25, a las 18:00, tendrá lugar el rezo del Santo Rosario donde está instalada la capilla ardiente, a la entrada de la Residencia Don Pedro Ricaldone.
Don Manuel nació en Zadagós-Sandianes (Orense), el 16 de marzo de 1935. Hizo el Noviciado en San José del Valle (Cádiz), donde profesó el 16 de agosto de 1953. Estudió la filosofía en Utrera-Consolación (1953-56) Después del tirocinio en Córdoba (1956-59), finalizado el cual, hizo su profesión perpetua en Ronda (Málaga). Cursó sus estudios de teología (1959-63) en Posadas (Córdoba). La ordenación de presbítero la recibió en Posadas el 5 de mayo de 1963.
Desde entonces ha venido desarrollando su labor pastoral en Montilla (1963-66); Palma del Río (1966-67 y 1985-87); Tenerife (1967-73 Y 1994-2000); Valencia (1973-76 haciendo los estudios de pedagogía); Las Palmas (1976-79); Málaga (1979-84); Granada-Colegio (1984-85); Antequera (1987-93); Pozoblanco (1993-94); Córdoba (2000-02); Úbeda (2002-07); Algeciras (2007-08); Rota (2008-13); y de nuevo Algeciras de 2013 a octubre de 2017. Llegó a la residencia Don Pedro Ricaldone el 13 de Octubre 2017, con un cuadro de salud complejo: bronquitis crónicas y una aguda diabetes. En esta residencia ha permanecido hasta la mañana en la que ha fallecido.
Se recordará a don Manuel como salesiano muy bondadoso, de una gran capacidad de trabajo; piadoso, siempre a la escucha y con su pequeña dosis de “tozudez por sus raíces gallegas”.
Que el Señor Resucitado reciba al hermano Manuel en su Reino, entre todos aquellos que han entregado su vida a la misión salesiana, y que María Auxiliadora, a la que tanto amó, lo acoja con el cariño de Buena Madre del cielo.
Que descanse en paz.