Este martes ha sido otro día sin tregua: a primera hora de la mañana, don Ángel Fernández Artime se despedía de los jóvenes salesianos del postnoviciado de Granada tras concelebrar la Eucaristía; le esperaba un viaje de trescientos kilómetros hasta llegar a Cabezo de Torres, Murcia. Allí le esperaba en el polideportivo la comunidad educativo pastoral en pleno, presidida por su director Miguel Gambín; también había una representación de la Familia Salesiana local.
Fue una escala breve pero intensa, era la primera vez que un sucesor de Don Bosco visitaba esta obra salesiana que justo ese día cumplía sus 60 años de existencia. “¡Una hora bien aprovechada!” exclamó con justicia su director.
Poco antes de la hora de comer, el coche que transportaba al Rector Mayor hacía su entrada en la centenaria casa de El Campello. En el teatro del colegio le esperaba al completo el pequeño grupo de alumnos y profesores de Secundaria. El acto, con dos vistosas coreografías, fue muy del agrado del Rector Mayor quien afirmó repetidas veces sentirse muy a gusto gozando de un auténtico espíritu de familia. Don Ángel fue especialmente efusivo en los saludos al personal de administración y servicios, demostrando así su estima por todas las personas que colaboran en cada casa salesiana.
La visita a los salesianos ancianos y enfermos en la residencia de la propia casa fue especialmente emotiva y se desarrolló en un clima de oración. En sus breves palabras el Rector Mayor los invitó a que vivieran con gran serenidad y paz este momento de sus vidas y les invitó a rezar por la Congregación Salesiana.
El momento culminante de la jornada llegaba a media tarde cuando don Ángel, acompañado como siempre del Inspector Cristóbal López y del director local, Rosendo Soler, presidió en el polideportivo del Colegio Don Bosco de Alicante un espectacular acto en el que participó toda la comunidad educativo pastoral local y nutridos grupos de la Familia Salesiana de cada una de las presencias salesianas de la provincia de Alicante y la Región de Murcia.
Hubo momento para la oración por la paz y para la danza, para las fotografías y, cómo no, para un diálogo más que interesante entre dos jóvenes profesores del colegio Don Bosco y el Rector Mayor. Entre sus respuestas, podríamos destacar su llamada a educar en la interioridad “para descubrir que en la vida Dios puede estar muy cercano tocándote el corazón”. Don Ángel invitó a los padres y madres presentes a educar a sus hijos en el valor del servicio y la donación desinteresada como respuesta a una sociedad actual que no aprecia la gratuidad en la entrega.
Un castillo de fuegos artificiales y una cena privada con un numeroso grupo de salesianos puso punto final a un día que muchos ya no olvidarán.
Este miércoles el Rector Mayor llega a Valencia para visitar las casas San Juan Bosco y San Antonio Abad.
