En 1949 se fundó un seminario salesiano a Martí-Codolar, en Barcelona, en 1966 este antiguo seminario se transformó en un centro teológico y se abrió a otras congregaciones religiosas, durante los años 80 comenzaron a estudiar laicos y en 1996 se creó oficialmente el Instituto Superior de Ciencias Religiosas Don Bosco, que en el transcurso de su historia ha acogido más de mil estudiantes repartidos por todo el mundo y que hoy sigue encarando el futuro con pasión evangèlica y pastoral, impregnado de un carisma salesiano profundo.
El salesiano Jordi Latorre ha pasado por los micrófonos del programa "Paraules de Vida" de Catalunya Ràdio y explicó que el Instituto "se distingue por su talante teológico y pastoral, un rasgo del carisma salesiano, siempre desde una perspectiva muy pastoral y práctica ".
La aportación formativa del Instituto en relación a otros que ya existen explica Latorre que "se centra básicamente en la formación pastoral para trabajar en los diferentes ámbitos de la evangelización hoy en día, sea en parroquias, escuelas, centros recreativos o centros sociales, pero también en centros de salud u hospitales. "
Y añade que "se han tenido que abrir a las nuevas tecnologías, con una apuesta clara por la formación online que también se ofrece en diferentes formaciones, como es el caso de la especialidad en Pastoral, así como también de una nueva apuesta del Instituto que seguramente este próximo curso se ofrecerá: un Bienio de formación cristiana básica online para educadores de escuelas, parroquias, centros recreativos, etc, que ofrezca una formación cristiana básica para las personas que trabajan en instituciones educativas cristianas o de cualquier tipo ".
El Instituto, además de ofrecer una formación humanística, filosófica, teológica y pastoral, tiene como valor añadido y diferencial el carisma salesiano y una atención personalizada a todos los estudiantes.
"Actualmente tenemos 72 estudiantes entre las diferentes secciones, no es un número alto comparado con el ámbito civil, pero si consistente en el ámbito religioso pero no excesivamente alto.
Esta cifra nos permite una atención muy personalizada de nuestros alumnos ", remarca Latorre.
Preguntado por cómo se vivirá el bicentenario desde la obra salesiana de Martí Codolar – que engloba varios proyectos además del Instituto – responde que uno de los objetivos es renovar la presencia educativa donde estamos situados, en el barrio de la Clota, del Carmelo y del Valle de Hebrón, fuertemente golpeados por la crisis, y también la inauguración de un museo dedicado a la familia Martí-Codolar y a la visita de San Juan Bosco en esta casa en 1886.
"El Museo quiere mantener vivo el recuerdo de tres personas que marcaron la vida religiosa barcelonesa, el señor Lluís Martí-Codolar, Doña Dorotea de Chopitea y nuestro fundador, San Juan Bosco", concluye el director del Instituto.