El pasado 22 de junio se celebró la última reunión del curso de la Comisión Inspectorial del Itierario de Educación en la Fe (IEF), en Madrid-Atocha, en la Comunidad del Teologado. Han participado los sietes miembros que la constituyen: Jorge Juan Reyes, Francisco J. Pérez, Manuel Olid, Alberto Payá, Maje Yagüe y Salva Martín. En el orden del día previsto, se han abordado los siguientes temas: se ha revisado el curso que concluye; se han programados los objetivos y las reuniones del curso próximo, teniendo presente las orientaciones del POI y del PEPSI; se han estudiado los datos recogidos en la última consulta que se ha hecho a las casas a finales de mayo acerca de la estructura local y sobre cómo funcionan los grupos de fe en cada casa; se han establecido dos temas de reflexión para los próximos meses, la experiencia celebrativa del IEF y las comunidades juveniles; y se ha dado un último repaso al borrador de la carta de identidad que durante estos meses se ha elaborado, y que en el curso próximo pasará a ser estudiada por el Equipo Inspectorial de Pastoral Juvenil, para que sea aprobada por el Consejo Inspectorial y pueda ser implementada en las casas.
El análisis de los datos que se han recogido en la consulta hecha a las casas, ha permitido descubrir algunas debilidades que tiene en estos momentos nuestro IEF: la celebración semanal de la eucaristía y la formación-acompañamiento de los animadores. Por otra parte, también se han podido observar otras fortalezas, como el trabajo con la nueva metodología que propone el Libro Guía, que se ha consolidado en casi todas las casas, el uso de las fichas para los grupos que se han preparado desde el Centro Nacional de Pastoral Juvenil, o la unidad cada vez más real de las etapas de la infancia con el resto del Itinerario.
Ya son cuatro años los que la Comisión lleva trabajando y prestando este servicio de coordinación, reflexión y animación a toda la Inspectoría. El IEF se reafirma como una realidad pastoral de especial importancia en nuestra obras, aunque queda trabajo por hacer para seguir creciendo más y dando calidad a los proceso de maduración que viven los niños, adolescentes y jóvenes en esta hermosa realidad de nuestra pastoral juvenil.
