Por Comunicación La Orotava
La Orotava celebró en la tarde del lunes 5 de julio una eucaristía de acción de gracias por la presencia salesiana en la Villa desde 1948.
Don Óscar Luis Guerra, párroco de Nuestra Señora de la Concepción de La Orotava, presidió este agradecimiento por la labor realizada en el municipio desde hace setenta y tres años. Durante el acto concelebraron el director Abel Medina, José María Martín y Lucas Camino, los tres sacerdotes salesianos que han formado la actual comunidad religiosa durante los últimos años; Felipe Acosta, director de Salesianos La Cuesta; Domingo Ponce y Aarón Delgado, sacerdotes naturales de La Orotava. También se hicieron presentes, el Alcalde Francisco Linares y miembros de la Corporación Municipal; el Presidente del Patronato de la Fundación San isidro; la Directora del Colegio y el claustro de profesores, Salesianos Cooperadores, ADMA, Antiguo Alumnos y demás miembros de la Familia Salesiana y representantes de las diferentes congregaciones religiosas del Valle de La Orotava.
Dice el refranero que «Es de bien nacidos ser agradecidos». Pocas veces estas palabras han cobrado tanto sentido en el ámbito salesiano. Don Óscar comenzaba dedicando sus primeras palabras para expresar la gratitud por el servicio de la Congregación al Colegio, a la comunidad parroquial y al Valle de La Orotava por su acompañamiento espiritual y su trabajo diario con los más jóvenes.
Compartió con los allí presentes que las semillas sembradas durante más de siete generaciones han dado buenos frutos y han enseñado a recurrir a la Madre Auxiliadora en las necesidades que se han presentado en la vida, con la certeza que Dios nunca deja de la mano. A Dios agradeció «que los padres salesianos hayan sido puentes para el encuentro con Cristo de tantas generaciones, marcados por el carisma de San Juan Bosco».
El acto continuó con un sencillo vídeo, a través del cual, se hace un recorrido por la historia para agradecer a todas las comunidades que han estado presentes en el municipio canario, empezando por la primera, que llegó a La Orotava en agosto de 1948, encabezada por Don Claudio Sánchez y Don Víctor Rodríguez, que con los años se convirtió en un referente salesiano y social en la zona alta de la Villa y finalizando con la Comunidad actual.
En representación de la Congregación Salesiana, el director Abel Medina, compartió, con emoción, que no les gusta tener que irse de una Casa donde han compartido tanto y reconoció la buena sintonía que ha existido siempre entre los salesianos y La Orotava. Miles han sido los antiguos alumnos que se han formado en la espiritualidad salesiana y se han convertido en honrados ciudadanos y buenos cristianos. También tuvo palabras de agradecimiento para todas aquellas personas que, a lo largo de los años, han colaborado de una u otra manera con los salesianos. De forma especial, agradeció al Patronato de San Isidro por confiar a la congregación esta maravillosa obra.
“Esto no se acaba. Nos trasladamos los salesianos a La Cuesta. Aquí vendrá un Salesiano como Director Titular a celebrar y a dar clase. No os abandonamos. Os queremos y queremos seguir trabajando con vosotros”, concluyó diciendo.
Con estas bonitas palabras y con el nuevo lema animó a la familia Salesiana para tomar las energías necesarias para aceptar el nuevo reto de llevar esta misión adelante, “Nos mueve la esperanza”.