Cerca de 4.000 jóvenes, así como sus familias y los miembros de la comunidad salesiana de dos centros de formación profesional de Lubumbashi, en la región sureste de la República Democrática del Congo, se beneficiarán de dos proyectos de agua potable que incluyen la renovación de las anticuadas conducciones que existían.
El Instituto San Juan Bosco Kansebula y el Centro Chem Chem ofrecen una oportunidad educativa a los jóvenes en situación de riesgo por causa de la pobreza. El Instituto Kansebula forma a los alumnos en ciencias humanas, mientras que el Centro de Chem Chem está especializado en la capacitación agrícola.
Ambas instituciones preparan a los jóvenes para que tengan mejores oportunidades laborales en el futuro. Sin embargo, existen todavía grandes problemas derivados de la falta de energía y el agua potable que dificultan el aprendizaje y unas condiciones higiénicas básicas para los alumnos.
Por todo ello, Misiones Salesianas de Estados Unidos ha comenzado dos proyectos para garantizar agua limpia y fresca para los estudiantes y la sostenibilidad de las fuentes de agua para sus instalaciones. En Kansebula, el proyecto consiste en una torre de agua y dos tanques de 2.500 litros. Una vez completado, este proyecto mejorará la gestión del centro y de la zona.
En Chem Chem el proyecto implica la actualización del sistema de agua existente para permitir que los estudiantes tengan agua potable. Esto se está logrando mediante la perforación del pozo existente y añadiendo una torre de agua y la instalación de dos tanques de agua también de 2.500 litros.
El futuro son los jóvenes
La República Democrática del Congo se ha visto afectada por una guerra civil desde 1998. Como resultado, se han producido cerca de 5,4 millones de muertes, la mayoría de ellas por causas no violentas, como la malaria, la diarrea, la neumonía y la desnutrición.
Cerca de 1,5 millones de personas han sido desplazadas internamente o se han convertido en refugiados en países vecinos.
Los jóvenes representan alrededor del 19% de la población del país, pero también suponen el 47% de las muertes durante este conflicto.
La ciudad de Lubumbashi cuenta con la riqueza de recursos agrícolas y minerales, pero la zona se enfrenta a numerosos retos económicos y sociales.
Un gran porcentaje de niños y adultos jóvenes han abandonado la escuela porque no pueden pagar la matrícula, uniformes y útiles escolares y esto deja a muchos adultos jóvenes desempleados y viviendo en las calles.