El Inspector de la Inspectoría María Auxiliadora, Cristóbal López, y el coordinador inspectorial de plataformas sociales, José Luis Aguirre, visitaron a los jóvenes de los Pisos de Emancipación Magone de Valencia, aprovechando su estancia en la ciudad para participar en una reunión del consejo inspectorial.
Aprovechando la estancia del consejo inspectorial en la ciudad de Valencia, el Inspector, Cristóbal López y el Coordinador Inspectorial de Plataformas Sociales, Pepelu Aguirre visitaron a los jóvenes de los pisos de Emancipación Magone de Valencia, la noche del 5 de noviembre, en compañía de la educadora de los pisos, de Rosana Palomares, y del responsable de plataformas sociales de la zona centro de la Inspectoría, Segundo García.
El Inspector pudo dialogar con algunos de ellos en su propia lengua, cosa que resultó enormemente positiva para los jóvenes. En un ambiente muy familiar y distendido, saboreando un buen té – muy propio de la cultura Africana – los jóvenes contaron al inspector los aspectos que más valoran de su estancia en el proyecto. Cada cual a su manera y con estilo propio dejó rienda suelta para que hablara el corazón. Entre otras cosas, lo jóvenes destacaron “el ambiente de familia que te hace sentir como en tu propia casa”, “la confianza depositada en ellos”, “la disponibilidad permanente del equipo educativo para atender sus necesidades”, “las posibilidades que se les abren de cara al futuro”, “la ayuda para la formación, búsqueda de empleo y para la obtención de permisos de residencia y trabajo”, y “la igualdad que hay entre todas las personas por contraste con una sociedad dividida en castas en otros países”.
Todos se sienten muy agradecidos por la oportunidad de participar en este proyecto y porque se les trata como una familia. El inspector, a modo de buenas noches, les transmitió que “la mejor forma de ser agradecidos es repetir ellos mismos la experiencia con otras personas que se encuentren en situación de necesidad. Que más adelante, cuando estén mejor situados en la vida no olviden que ellos recibieron ayuda y que ahora quizás puedan ofrecerla a los demás. Quien no vive para servir no sirve para vivir”. Con estas palabras se despidió la jornada.
En este momento en los pisos de emancipación Magone de Valencia hay una decena de chicos, tres de ellos de nacionalidad maliense, uno de Guinea Conakry, tres de Marruecos, uno de Gambia, uno de Pakistán y un español.
