Del 1 al 4 de junio, la comunidad salesiana de Roma "San Lorenzo", Centro Nacional de Obras Salesianas (CNOS) de Italia, fue a visitar al Centro Nacional de Pastoral Juvenil Salesiana de España, con sede en Madrid, para un encuentro de estudio y conocimiento, vivido en un clima de gran fraternidad.
La organización del evento, impulsado por la creación de la nueva Región Mediterránea deseada por el Capítulo General 27, los responsables de los dos centros nacionales calificaron como significativo y muy oportuno este encuentro, ya querido en otras ocasiones y siempre pospuesto por muchas razones. Para actuar como anfitrión estuvo el P. Koldo Gutiérrez, Coordinador Nacional de la Pastoral Juvenil, quien también acompañó y facilitó el encuentro con algunas realidades muy significativas presentes en Madrid.
En el primer día, después de una visita al Museo del Prado, con sus obras de muchas nacionalidades, los salesianos se detuvieron en la casa salesiana de Atocha, donde se encuentra el Centro Inspectorial de Madrid; allí se celebró la Eucaristía, recordando la JMJ del 2011 y el encuentro mundial del Movimiento Juvenil Salesiano, y luego visitaron la capilla en memoria de los mártires españoles Salesianos. En la casa salesiana "Santo Domingo Savio", además, los religiosos italianos han conocido más sobre el sistema de formación profesional en España.
Los dos días centrales del viaje se dedicaron por entero al encuentro entre los dos centros nacionales: definición y composición, actividades llevadas a cabo por las oficinas individuales, procesos de toma de decisiones… En la fase inicial trabajaron juntos para una confrontación más amplia, luego han dedicado un momento de diálogo para oficinas y sectores, con el fin de facilitar el estudio de temas específicos y de proyección.
Un balance final de esta experiencia, en los Salesianos de ambos países se mantuvo un positivo sentido de satisfacción, por la fraternidad experimentada, el diálogo enriquecedor y constructivo, el descubrimiento de dos realidades similares, pero también diferentes. La despedida estuvo acompañada por el compromiso de reencontrarse en un año, esta vez en Roma, para dar un paso adelante: del conocimiento a la colaboración. Lema español que destaca el sentido y la validez, casi indicando una dirección de marcha: ¡juntos somos mas!
