El jueves, 12 de diciembre, la Cruz de Lampedusa llegó a Úbeda. Se trata de una cruz bendecida por el Papa Francisco y hecha de trozos de pateras naufragadas en las costas de Lampedusa que ha permanecido durante toda la mañana y parte de la tarde en la capilla del Colegio Santo Domingo Savio (Salesianos) y ha sido un auténtico regalo. Todos los alumnos, desde los pequeños de infantil hasta los de secundaria, han podido visitarla y tener un momento de oración ante ella. Y es que ante este gran drama cómo es la muerte de más de 20.000 inmigrantes, entre ellos muchos niños, los cristianos lo mínimo que podemos hacer es rezar para que tragedias como esta no ocurran más.
Los alumnos salesianos de Úbeda tuvieron la oportunidad de escribir en un pequeño papel aquellas veces que con su comportamiento han hecho algo mal a las personas que les rodean, queriendo, así, representar las veces que nos olvidamos de aquellas personas que lo están pasando mal.
La Cruz de Lampedusa
Precisamente, la Cruz de Lampedusa recibe el nombre de la isla italiana a donde acudió el papa Francisco en julio de 2013 en su primera visita fuera de Roma tras ser elegido, y donde días antes naufragó un barco con inmigrantes y refugiados, de los que 349 murieron. "Aquel suceso impactó tanto al papa Francisco que un mes después decidió que su primer viaje como pontífice fuera de la ciudad de Roma, tuviera lugar precisamente a la isla de Lampedusa, puerta de entrada a Europa para muchos inmigrantes". El Papa la recibió como regalo por la fundación italiana Casa dello Spiritu e delle Arti (Casa del espíritu y de las artes), la bendijo y animó a llevarla por todo el mundo.
La iniciativa de la cruz itinerante -que se llama «Viaje de La Cruz de Lampedusa»- parte de la fundación italiana Casa dello Spiritu e delle Arti que desde hace años trabaja en Milán con las personas más desfavorecidas y tiene como objetivo transmitir un mensaje de «solidaridad y paz entre las ciudades, comunidades, parroquias y culturas».