Del 10 al 14 de septiembre, en el Instituto “Pío XI” de Roma, tuvo lugar el Primer Encuentro mundial de Delegados de la Familia Salesiana. Promovidos por el Secretariado para la Familia Salesiana, donde participaron 36 Delegados de 33 Inspectorías: 5 de África-Madagascar, 5 de Europa Central y del Norte, 10 del Mediterráneo, 8 de América cono Sur y 8 del Cono Sur. Además de este encuentro, dirigido a los Delegados de las lenguas neolatinas, el Secretariado de la Familia Salesiana organiza, un similar encuentro reservado a los Delegados anglófonos, previsto para los días 17-22 de septiembre.
El encuentro fue coordinado por el P. Eusebio Muñoz, Delegado del Rector Mayor para la Familia Salesiana, con el equipo del Secretariado: P. Giuseppe Casti, Delegado de los Salesianos Cooperadores; P. Joan Lluis Playà, Asistente Espiritual de las Voluntarias de Don Bosco (VDB) y de los Voluntarios con Don Bosco (CDB); P. Pierluigi Cameroni, Animador Espiritual de la Asociación de María Auxiliadora (ADMA); y el P. Jayapalan Raphael, Delegado de los exalumnos de Don Bosco.
El objetivo del encuentro fue presentar la figura y el papel del “Delegado Inspectorial para la Familia Salesiana”, compartiendo algunos temas: “La Carta de Identidad Carismática de la Familia Salesiana; la vocación y misión de los laicos en la Iglesia y en la Familia Salesiana; las relaciones de la Familia Salesiana con la Pastoral Juvenil y la Formación; el Consejo Inspectorial y local; el Movimiento Salesiano”.
Fueron significativas las intervenciones y la presencia de algunos líderes mundiales de los grupos: el Sr. Antonio Boccia, Coordinador de los Salesianos Cooperadores; el Sr. Renato Valera, Presidente de ADMA; el Sr. Michal Hort, Presidente de los exalumnos de Don Bosco; la Vice Responsable de las de las de las VDB. Las ponencias y presentaciones hicieron palpar de manera concreta la belleza y la variedad del carisma salesiano, sobre todo en la forma en que es vivido e interpretado por los laicos.
La visita a la Sede Central Salesiana del Sacro Cuore, de Roma, de fue muy apreciada, tanto por el encuentro con el P. Francesco Cereda, Vicario del Rector Mayor, como por la visita a la Basílica del Sagrado Corazón y a las habitaciones de Don Bosco.
En el compartir final hubo una satisfacción unánime por el encuentro, por la rica experiencia de fraternidad y conocimiento; por los contenidos propuestos y discutidos; por el reconocimiento de la riqueza de vida, por la variedad y las posibilidades presentes en la única familia carismática; y, sobre todo, por el reconocimiento y la relevancia del gran don de Don Bosco y su carisma a la Iglesia y a la sociedad.