La Fundación Amancio Ortega lleva a cabo este programa de becas, con el objeto de facilitar a jóvenes de institutos y colegios españoles un proceso de inmersión en una cultura extranjera, a la vez que perfeccionan el aprendizaje de la lengua inglesa, durante un año académico.
De entre los dieciséis seleccionados en toda Extremadura, dos han sido del Colegio Salesiano “Ramón Izquierdo” de Badajoz, Eugenio Cano, que irá a EEUU y Francisco Moreno, en su caso a Canadá. Ambos convivirán con una familia del país de acogida y cursarán Grado 11 (equivalente a Primero de Bachillerato). La beca cubre el 100% de los servicios necesarios para realizar un curso escolar en el extranjero: viaje, tasas de escolarización y matrícula en un instituto público, alojamiento y manutención en una familia de acogida, seguro médico y de accidentes, convalidación del año académico y apoyo continuado durante los diez meses de estancia; en ningún caso la beca supone la aportación económica del valor de estos servicios al beneficiario.
El Programa convoca 600 becas para estudiar Primero de Bachillerato en un High School en Canadá o Estados Unidos el próximo curso escolar 2019-2020
Los protagonistas lo cuentan de primera mano sus ilusiones y el proceso seguido:
¿Qué os ha llevado a presentaros?
Francisco comenta que sobretodo la oportunidad de estudiar en el extranjero sin dañar mucho la economía doméstica y Eugenio comenta que siempre le ha gustado las culturas distintas, “cuando ví la posibilidad de esta Beca pensé que era mi oportunidad”
¿En qué consiste el proceso de selección?
Comentan que hay que presentar el expediente académico y el IRPF familiar del año anterior para la primera selección, “en nuestro caso se presentaron 10.000 personas” comenta Eugenio. Después, añaden, se evalúan varias destrezas, reading, listening, y writing. Esta prueba supuso un recorte importante puesto que sólo pasaron 1800 personas a la siguiente prueba, que fue una entrevista oral vía Skype.
“Aquí había que demostrar nuestro nivel oral, ya que había que hablar sobre un tema a elección propia en inglés. También, nos hacían preguntas sobre nuestro interés en la Beca y nuestra capacidad de adaptación a otros entornos, bueno, la palabra que más nos han repetido es “resiliencia”, jaja, que es la capacidad de salir de nuestra zona de confort.”
¿Cuál es la prueba que consideráis más difícil?
“Sin duda la oral, porque no sabíamos qué nos iban a preguntar, y vas a ciegas, los nervios aquí fueron intensos, con idas al baño incluídas, jaja” afirma Francisco. Eugenio aporta que al salir de la prueba escrita salió con muchas dudas, pero que lo considera algo afrontable para un alumno de 4º de ESO.
¿Habéis tenido alguna orientación o reuniones para preparar vuestro viaje?
“Si, hemos estado un fin de semana en Madrid conviviendo con los españoles ya seleccionados, en dos grupos, los que van a Canadá y los que van a EEUU cada uno por separado”, comentan entre los dos.
¿Cuáles son vuestras expectativas?
Afirman que no saben qué familia les tocará, puesto que la beca consiste en convivir con una familia durante un año como uno más, y son familias que se prestan voluntarias, por lo tanto tendrán que adaptarse a sus costumbres, actividades,…
También tienen ciertos miedos sobre si entenderán bien el idioma, si será difícil hacer amigos nuevos o si los primeros días se sentirán solos…
¿Qué es lo que más os ilusiona de esta experiencia?
“Aprender la cultura de otro país, convivir con otras familias, mejorar nuestro nivel de inglés, poner a prueba nuestras cualidades y capacidades…” comentan con gran entusiasmo.
¿Qué creéis que vais a echar de menos?
Los dos coinciden: “la familia, puesto que no volvemos hasta que no pasen los 10 meses; cosas simples como tu casa, tu calle, tu entorno; tener todo cerca…”
Por último, quieren mostrar su agradecimiento a los profesores de inglés que han tenido en los salesianos, especialmente a su actual profesora, Cristina, que en sus clases les recordó esta Beca.
Eugenio quiere lanzar un mensaje de ánimo para los futuros aspirantes: “que lo intenten, que no crean que es imposible, que todo se puede conseguir”.
Con estas buenas vibraciones por parte de los protagonistas se cierra esta entrevista, deseándoles desde toda la casa salesiana de Badajoz y en especial los integrantes del departamento bilingüe, que su experiencia sea lo más enriquecedora posible para que su formación y camino de la vida sea exitoso, productivo y educado desde el corazón.