Llega el verano, los colegios cierran sus puertas al igual que la gran mayoría de las actividades extraescolares, que se toman un descanso para las vacaciones. Pero los voluntarios que dan vida a la asociación juvenil salesiana Aldaba, nunca cierran por vacaciones, y siguen ofreciendo alternativas a los niños utreranos que pertenecen a familias que están en riesgo de exclusión, gracias al impulso de su proyecto solidario «Oberti».
A lo largo de todo el año, casi cuarenta niños residentes en la barriada de La Paz, uno de los lugares de la localidad más azotados por la lacra del desempleo, participan en numerosas actividades que sirven como refuerzo de las clases escolares y en las que se imparte una importante educación no formal, en un proyecto con marcados tintes solidarios. Propuestas que no se interrumpen durante el verano, ya que los miembros de la asociación saben que es un momento en el que se torna necesario seguir ofreciendo alternativas.
Actividades de refuerzo
La propuesta veraniega de la asociación Aldaba llega así a su quinta edición, mientras que este año están participando 35 jóvenes, en un proyecto que llega en el mes de julio bajo el nombre de «La aventura de vivir». El escenario para desarrollar esta iniciativa son las instalaciones del colegio salesiano «Nuestra Señora del Carmen», donde los chavales están disfrutando de numerosas actividades lúdicas, de refuerzo académico y de educación en valores.