Veintiún alumnos junto con dos profesores del Grado Superior de Automoción de Salesianos Zaragoza, han realizado en este mes de marzo, el segundo viaje de estudios al norte de Italia con la intención de visitar museos y factorías de vehículos. Además de comprobar las aplicaciones de sus estudios de Grado Superior (Factoría de Ducati, Museo de Enzo Ferrari, Factoría de Pagani, Museo internacional del automóvil de Turín) en este viaje aprovecharon para crecer en salesianidad.
La visita a la ciudad de Venecia, el arte y la historia monumental de Turín, la gastronomía italiana y, cómo no, la convivencia entre ellos y los profesores, que siempre enriquece, “han ayudado a fomentar la amistad y la madurez, otros regalos que todos nos llevamos personalmente de vuelta” según palabras de los profesores acompañantes.
Los organizadores del viaje explican que quisieron visitar en Turín el origen y la esencia de la obra salesiana de Don Bosco, allí donde todo comenzó en Valdocco. Agradecen muy fraternalmente a Rafael Gasol, salesiano español destinado en Valdocco, su cálida acogida y sus acertadas explicaciones dadas a los chicos en todos los lugares más importantes de la vida de Don Bosco.
A continuación los profesores de Salesianos Zaragoza, Carlos Santín y Diego Mazuecos explican el reto que supuso proponer esta experiencia a los alumnos y la respuesta que de ellos obtuvieron:
“Cuando a unos alumnos entre 19 y 23 años, de Formación Profesional se les plantea una visita “religiosa” dentro de un viaje de estudios, a los profesores nos surge la duda del interés que pueda tener para ellos, si sólo están deseando que se acabe, si lo ven como un tostón o algo que “toca” por ser salesianos… En nuestra sociedad “no está de moda” todo lo relacionado con la Iglesia… Aun así¿Por qué no? ¿Por qué no saber de dónde surge la identidad de tu colegio, de tu casa salesiana?¿Por qué no saber quién fue este hombre y cómo proyectó su futuro, su vida, para llevar a cabo semejante labor?… ¿Acaso el progreso social y económico actual de la Italia visitada, no guarda relación con la filosofía de Don Bosco sobre la idea de la juventud como motor del mundo desde sus orígenes allá en Valdocco?…
Los alumnos, tras la visita, nos respondieron y sorprendieron de forma grata…Sin medir su grado de creencia o afinidad religiosa todos coincidieron que merece mucho la pena visitar Valdocco… Oír su historia, conocer los inicios, ver a Don Bosco…Alguno nos decía sentirse orgulloso de pertenecer a la familia salesiana, otro que haría todo lo posible para traer a su madre a que visite este lugar, otro de nuestros jóvenes le pedía a Don Rafael que le dejase entrar a la basílica para rezar a solas unos minutos,… Todos ellos, mientras duró la visita, mantuvieron un respeto y una actitud positiva en todo momento ¡son jóvenes de Don Bosco!
En definitiva, ha sido un viaje que ha merecido la pena en su conjunto y que es muy recomendable que lo hagan todas las casas salesianas con sus jóvenes”.