Teresa Villanueva, salesiana cooperadora en Salesianos Zaragoza, ha sido reconocida con la Medalla de Oro al Mérito Profesional por el Colegio de Enfermería de Zaragoza. Enfermera de la UCI neonatal del hospital Miguel Servet de Zaragoza, Teresa es una mujer muy cercana, amable y cariñosa, cualidades que, junto a su experiencia de más de 30 años de profesión, ayudan a tratar a estos bebés y sobre todo a apoyar a sus familias en momentos tan dolorosos.
Desde el curso 2015/2016 es además profesora asociada en la Facultad de Ciencias de Salud de la Universidad de Zaragoza y ejerce desde 2016 como tutora de la Unidad Docente de Enfermería Pediátrica en el Hospital Infantil. También colabora en la formación de los futuros profesionales de Enfermería que realizan sus prácticas en la UCI Neonatal. Dentro de la casa salesiana de Zaragoza, colabora como catequista de confirmación y postconfirmación desde hace 5 años.
Teresa ha recibido este premio con sorpresa, ella desconocía que un grupo de padres habían pensado presentar su candidatura al premio; fueron recogiendo apoyos entre sus compañeros y asociaciones con las que Teresa había tenido relación y finalmente presentaron su candidatura sin ella saberlo.
Teresa recibió la noticia con gran asombro y sorpresa, todavía está abrumada: “es un regalo, jamás pensé que una simple enfermera de base pudiera recibir un galardón como este. Me pareció increíble”
Además de la medalla, fue obsequiada con un libro testimonial cuya portada es una réplica de un cuadro de la pintora Susoleto en el que aparece Teresa con un bebé en brazos mirando una estrella que representa a los bebés que no lo han conseguido. Esta obra se exhibe en las salas de consultas del Hospital Infantil y en la entrada a la UCI para humanizar estos espacios y hacerlos más cercanos a los niños. Según sus palabras: “este regalo es un “quita penas”. Cuánto amor hay en ese libro!; va a ser mi libro de cabecera”.
Teresa, con fuertes valores morales, proviene de una familia religiosa, firmó su promesa como salesiana cooperadora con miedo de no estar a la altura, pero su buen hacer, su labor profesional y su talento innato para darse a los demás haciendo el bien de la mejor manera posible ha tenido su recompensa.
Los salesianos cooperadores forman la rama laica fundada por Don Bosco, personas que sin ser religiosos comparten su preocupación por la formación de los jóvenes y la salvación de su alma compartiendo la filosofía de Don Bosco.