“¡Id hacia adelante con valentía y sin miedo! Quien nunca se equivoca es el que no hace nada”. Este es el mensaje con el que el papa Francisco recibió el viernes 25 de noviembre a unos 140 religiosos, representantes de muchas congregaciones reunidos en Roma para la 88ª Asamblea General de la Unión de Superiores Generales (USG). El discurso del Santo padre fue el acto final de la Asamblea General realizado en el "Salesianum" de Roma, con el tema “Id y llevad frutos. La fecundidad de la profecía”.
En la conversación con los religiosos, que duró casi tres horas, el papa Francisco respondió a muchas preguntas de los superiores y ofreció muchas ideas. Sobre el tema específico de la reunión, indicó que la tarea de los religiosos es vivir el Evangelio a la letra, sin añadir nada; y así dar testimonio al mundo sobre todo a las Iglesias locales. Manifestó la importancia de que los religiosos participen plenamente en la vida diocesana y sepan contagiar con sus respectivos carismas. Pidió para que sean creativos con los jóvenes candidatos a la vida religiosa y protejan las etapas de discernimiento, para evitar posibles escándalos debido a la inmadurez de los miembros de sus congregaciones. Finalmente se refirió a la importancia del servicio a los pobres: “Si la Iglesia no trabaja con los pobres no es la Iglesia… ¡La Iglesia debe ser pobre con los pobres!".
En los dos días anteriores, en el “Salesianum”, se realizaron varias sesiones de reflexión entre los superiores religiosos. Para la apertura de las reflexiones estuvo Bruno Cadoré, quien presentó “los desafíos ad intra y ad extra de la profecía”.
En una mesa redonda intervinieron Fernando Millán Romeral, carmelita; Michael Perry, de los hermanos menores, y Emili Turú, de los Hermanos Maristas; quienes pronunciaron discursos, sobre el valor de la formación permanente, sin la cual decae el apostolado; el valor profético de la verdad incluso de cara a los escándalos que pueden amenazar la reputación de una congregación. Por último se presentó la experiencia de los Hermanos Maristas de “Lavalla200”, sobre la interculturalidad y la responsabilidad de los laicos.
En el segundo día de trabajo, Pascual Chávez, Rector Mayor Emérito de los Salesianos, recordó a los superiores generales la importancia de saber aceptar los desafíos del momento presente como la única manera de hacer espacio a los jóvenes religiosos.