Los activistas de la Plataforma de Afectados por las Hipotecas (PAH), Joaquín Sánchez y José Antonio Vives, en calidad de miembros del colectivo “En el nombre de Dios ¡basta ya de desahuciar a las familias!”, participan desde el martes 2 de noviembre y hasta el sábado 5, en el III Encuentro Mundial de Movimientos Populares con el Papa. Este Encuentro es un espacio de diálogo compartido entre organizaciones de base de todo el mundo y la Iglesia católica. Está promovido por el Consejo Pontificio de Justicia y Paz junto con un Comité Organizador de los movimientos populares, y tiene el apoyo expreso del papa Francisco.
Tanto Joaquín Sánchez como José Antonio Vives participaron en las dos ediciones anteriores en el Vaticano (2014) y en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia (2015). En esta tercera edición se reúnen 170 delegados y delegadas de unos 65 países que dialogarán entre sí y con el papa Francisco para «promover el protagonismo de los excluidos; contribuir a la construcción de los cambios estructurales que el mundo necesita apoyados en Evangelii gaudium y en Laudato si’; ayudar a las organizaciones populares a coordinar acciones y fortalecer el diálogo y la cooperación entre la Iglesia y las organizaciones populares».
A través de los cuatro días de encuentro se abordarán diferentes discusiones y debates bajo los ejes que ya históricamente vienen marcando el evento y que representan preocupaciones latentes para los movimientos como para el Papa: Tierra, Techo y Trabajo. En esta oportunidad también se abren nuevos debates ampliados a perspectivas de análisis y trabajo sobre Pueblo y Democracia, Territorio y Naturaleza y Refugiados y Desplazados del Mundo. Con el objetivo de tener nuevas herramientas, fortalecidas por la propia visión de los protagonistas de estas problemáticas.
Como ya planteó Juan Grabois del Comité Organizador del EMMP: “existe una enorme cantidad de organizaciones, que están integradas y organizadas por los excluidos y que no se resignan a la miseria que se les impuso, y resisten desde la solidaridad el actual paradigma tecnocrático. El diálogo entre nosotros y la Iglesia apunta a acompañar, promover y visibilizar estos procesos que surgen de las bases populares.”
En función de los ejes que engloba el encuentro afirmó: “Las 3-T siguen siendo el corazón de nuestros Encuentros; son derechos que están siendo conculcados por un sistema injusto que deja a millones de campesinas sin tierra, familias sin techo y trabajadores sin derechos. Por eso los protagonistas principales de nuestros Encuentros pertenecen a los tres grandes sectores sociales mencionados, los marginados del campo y la ciudad.”