Viernes, un buen día general para toda la escuela fue el disparo de salida de la fiesta. A partir de aquí niños, adolescentes y jóvenes disfrutaron de todas las actividades preparadas por un excelente equipo de profesores que, con generosidad y alegría, organizó un montón de actividades. Buenos días, celebraciones, teatro, concursos, gincanas y música fueron los ejes principales de una gran fiesta donde todos, pequeños y grandes, pudieron vivir la alegría del espíritu salesiano homenajeando nuestro padre fundador.
El sábado 30 de enero, un grupo de maestros de la escuela hacían los últimos preparativos para dejarlo todo a punto para la carrera de Don Bosco que se celebraría al día siguiente. Domingo, a las 10 de la mañana, se iniciaba una jornada con momentos entrañables. La carrera de Don Bosco servía para inaugurar una mañana, donde la historia de la escuela se hacía presente en sus pasillos. La exposición fotográfica y una gran maqueta del colegio servían de lugar de encuentro nostálgica para todos los asistentes.
La ofrenda floral a Don Bosco se convertía en el preludio de una profunda celebración eucarística vivida con alegría y fe, presidida por el obispo auxiliar de Barcelona, Sebastià Taltavull, con el vicario inspectorial Ángel Arsurmendi a su lado. Al finalizar la celebración se han hecho unos sentidos homenajes a varios miembros de la casa que celebraban sus 25 años de servicio, a D. Esteban Baigorri, salesiano, que ha dado su vida convirtiéndose en piedra viva esencial del colegio; a un miembro emérito del personal de servicio, Julián Martínez, que nos ha regalado una maqueta de la escuela construida por él mismo; Maria-Josep Alsina, Marina Calle, Lluís-Pau García y Francisco Martín.
Después de tanta profundidad hemos disfrutado de una paella gigante, para 450 personas. Para terminar esta festividad, vivida y compartida con la casa hermana de Martí-Codolar, hemos asistido a una gala solidaria a favor de la Fundación Magone.
Deportes, familia, oración, celebración, reunión, homenaje, servicio, encuentro, compartir, solidaridad, alegría, música y magia han sido algunas de las palabras clave que han acompañado este fin de semana especial. Palabras que definen el espíritu de Don Bosco, palabras que definen la casa salesiana de Horta y que nos ayudan a vivir y hacer realidad el rótulo de la caseta de I Becchi: Salesianos Horta, Questa è la mia casa!
