La hermandad de las Penas de Salesianos escribió en la mañana del 31 de enero una nueva página para su historia cofrade. Tras la adquisición de un solar frente al santuario de María Auxiliadora, la corporación nazarena puso la primera piedra para la construcción de su futura casa hermandad que se iniciará tras la Semana Santa venidera.
El acto, al que acudieron diversos hermanos mayores y autoridades de la ciudad, estuvo presidido por una imagen de San Juan Bosco que presidirá la hornacina que tendrán las instalaciones una vez que se encuentren finalizadas. En la urna que se introdujo como primera piedra se añadieron, entre otros, la medalla de la Cofradía, periódicos de la jornada, libros alusivos al santo salesiano y un ladrillo que entregó el bordador Juan Rosén hace más de 10 años para la construcción de la casa hermandad.
El hermano mayor de Salesianos, Juan Manuel León, destacó en el acto el esfuerzo que suponía para la Hermandad la realización de una casa "que será la de las Penas y el Auxilio de María". El deseo de la corporación nazarena es abrir al colegio de San Bartolomé y su entorno las instalaciones.
Los religiosos salesianos bendijeron el solar y la primera piedra y realizaron una oración dedicada a María Auxiliadora, patrona de la orden, antes de cubrir la urna con tierra.